10 mejores héroes del Studio Ghibli

Studio Ghibli, uno de los estudios de animación más conocidos del mundo, fue fundado por Toshio Suzuki, Isao Takahata y Hayao Miyazaki. La obra cinematográfica de Studio Ghibli es una mezcla emocionalmente diversa, que incluye películas icónicas como El castillo ambulante de Howl, La tumba de las luciérnagas y Spirited Away. Estas narrativas son únicas, pero muchas de ellas comparten temas comunes, desde el consumismo hasta el feminismo y todo lo demás.

Según el crítico Peter Schellhase, algunas familias del Studio Ghibli "son simplemente disfuncionales [...] también hay hogares realistas y estables" con padres atentos, un intento consciente por parte de los directores de reflejar la pluralidad sociocultural de Japón. Aunque los protagonistas de las películas de Ghibli suelen ser mujeres, algunos personajes masculinos roban ocasionalmente el protagonismo.

El protagonista de Porco Rosso era un piloto de caza humano llamado Marco Pagot antes de que una maldición lo transformara en un cerdo. Afortunadamente, no deja que su apariencia defina sus principios. Entre los pocos protagonistas masculinos de Ghibli, la política inflexible de Pagot, su ingenio icónico y sus inigualables habilidades de vuelo se combinan en un héroe totalmente cautivador y simpático.

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El espíritu inquebrantable de Marco Pagot lo convierte en el alma de Porco Rosso, posiblemente una de las obras más infravaloradas de Studio Ghibli. Este personaje, que tiene sus raíces en la era del cine negro, toma prestados varios rasgos de personalidad de los héroes del hardboiled como Rick Blaine en Casablanca (1942).

El director Hayao Miyazaki bautizó a la protagonista de su primera película con el nombre de la princesa Nausicaä de la Odisea de Homero. Al igual que el personaje de la antigua Grecia, la versión de Ghibli desprende un aura benévola por todos los poros de su ser. El deseo de Nausicaä de proteger la naturaleza supera sus más profundos instintos de autoconservación, cumpliendo así su arco salvador al ofrecer voluntariamente su vida.

Sus esfuerzos dan sus frutos, dando a esta sombría narración postapocalíptica un final inusualmente feliz. La vanagloria del heroísmo no tiene ningún efecto sobre Nausicaä: ella lucha únicamente porque quiere un mundo mejor para todos, y no porque quiera ser adorada como su Mesías.

Aunque Kiki's Delivery Service es juguetona y despreocupada en la superficie, la película profundiza en temas y situaciones bastante matizados. Kiki, de trece años, se embarca en un tumultuoso viaje de crecimiento y autorrealización, mezclando hábilmente los géneros de madurez y fantasía heroica.

Kiki es ferozmente independiente y se niega a permitir que sus circunstancias la hundan. A pesar de sus contratiempos mágicos y emocionales, consigue reunir la suficiente confianza en sí misma para recuperar sus poderes y rescatar a sus amigos. Kiki se sube a la montaña rusa de su vida con orgullo, aplomo y mucho encanto.

Ganadora del Oscar a la mejor película de animación, Spirited Away de Miyazaki es, sin duda, la película más conocida de Ghibli. Una serie de metáforas y alegorías que se entrecruzan en la narrativa, incluyendo el sobrenaturalismo, la ecología y el capitalismo desenfrenado.

La protagonista, Chihiro Ogino, se adapta a su difícil situación, sorteando la magia surrealista y los imprevisibles personajes del reino espiritual con un buen apoyo emocional de Haku. Chihiro acaba aprendiendo a equilibrar la empatía y la tenacidad, inspirándose a sí misma y al público embelesado. Chihiro es la prueba viviente de que cualquiera puede ser un héroe, sin importar la edad o el género.

Castle in the Sky se centra en gran medida en la conmovedora dinámica entre sus dos protagonistas, un niño terrestre huérfano y una princesa del cielo. Pazu y Sheeta pasan la mayor parte del tiempo evitando al coronel Muska y a sus socios belicosos, pero también desarrollan un vínculo inquebrantable durante el tiempo que pasan juntos.

Sheeta renuncia a su herencia real y destruye voluntariamente su hogar ancestral, mientras que Pazu arriesga continuamente su vida y su seguridad para ayudar a Sheeta a llevar a cabo sus planes. El castillo en el cielo concluye con una nota agridulce: Sheeta y Pazu salvan el mundo, aunque eso signifique perder la ciudad flotante de Laputa para siempre.

San, o la Princesa Mononoke, es un aspecto integral de la película homónima. Sin embargo, es el personaje del príncipe Ashitaka el que impulsa el argumento general. La Prin cesa Mononoke, que está repleta de temas, desde la ética medioambiental hasta el estigma sexual, explora la relación fluctuante entre la civilización y la naturaleza.

Ashitaka se esfuerza por responder a una de las eternas preguntas de la humanidad: ¿en qué momento la necesidad se convierte en codicia? Afortunadamente, su incapacidad para resolver este problema no impide que personas y animales convivan en armonía. Ashitaka modera su heroísmo con prudencia y paciencia, ganándose el respeto y la admiración de San.

La vida de Sophie Hatter, ciertamente anodina, se ve alterada cuando la Bruja de los Desperdicios la maldice con una senectud prematura. Sophie lleva la carga de la vejez sin muchas quejas, una perspectiva notablemente madura tanto de su vida como de su maldición.

Sophie no es una heroína en el sentido convencional, pero su ilimitada compasión la convierte en uno de los personajes de Ghibli más valientes de todos los tiempos. No sólo lucha con uñas y dientes para recuperar su cuerpo, sino que abraza a su némesis con los brazos abiertos, ilustrando un nivel de humanidad que motiva e influye en todos los demás personajes de El castillo ambulante de Howl.

A pesar de sus personalidades únicas, es prácticamente imposible separar los arcos de carácter de Mei y Satsuki. La mejor manera de describir a las hermanas es como una díada narrativa, ya que pasan por experiencias casi idénticas a lo largo de la historia. La actitud relativamente sensata de Satsuki choca adorablemente con la traviesa curiosidad de Mei, convirtiendo a esta pareja en el corazón palpitante de Mi vecino Totoro.

La intrepidez de Mei se contagia a su hermana mayor, lo que explica que ambas se sientan inmediatamente cómodas con los Totoros y los Catbus, entidades oníricas que están a un paso de convertirse en pesadillas. Muy pocos héroes de Ghibli son tan resistentes y perseverantes como Satsuki y Mei.

Un ejemplo magistral del género slice-of-life, Only Yesterday sigue la vida de Taeko Ojima, una mujer aparentemente ordinaria que vive en Tokio. La película yuxtapone la edad adulta de Takeo con hitos críticos de su infancia y adolescencia, desarrollando un montaje maravillosamente cálido de memoria y realidad.

Los veranos brumosos y los azafranes anaranjados crean un fondo nostálgico para el viaje cronológico de Takeo por el pasado, mientras que la promesa de un posible romance la mantiene firmemente anclada en el presente. Aunque la vida de Takeo es demasiado suave para ser una película de acción, su elección final requiere cantidades excepcionales de audacia y fuerza de voluntad.

Sosuke apenas tiene cinco años cuando salva a Ponyo, demostrando unos niveles de confianza y fiabilidad impresionantes para alguien tan joven. Al igual que Pinocho, el pez dorado Ponyo sólo quiere ser una niña de verdad, lo que desconcierta a su padre humano.

Por otro lado, su madre, la diosa del mar, accede a permitir la transformación de Ponyo, pero sólo si el corazón de Sosuke está en el lugar correcto. Cuando Granmamare le pregunta al niño si su amor por Ponyo se extendería "entre dos mundos", él comenta con entusiasmo que "amaría a todos los Ponyos" La inocencia infantil de Sosuke es al mismo tiempo su mayor fuerza y su rasgo más entrañable.