10 videojuegos que todo el mundo olvida que son una secuela

Ha habido secuelas que no sólo solucionan los problemas del original, sino que también introducen elementos que parece que deberían haber estado ahí todo el tiempo. Un ejemplo: hay una razón por la que los jugadores recuerdan Street Fighter II pero no el primer juego. A veces, la secuela recibe más atención que la entrega anterior, y las entradas posteriores adoptan ese nombre por motivos de marketing.

No es raro que las secuelas de los juegos eclipsen tanto a sus entradas anteriores que acaben siendo percibidas como la primera entrega de la franquicia. Ya sea por la suerte, por la mejora de las mecánicas o por una mezcla de ambas cosas, estos juegos dejaron huella mientras sus predecesores se desvanecían en el olvido.

Yeager Development tuvo mucha libertad creativa a la hora de desarrollar el décimo título de la serie Spec Ops. El único mandato de la dirección era que el juego tuviera una temática militar. El equipo se inspiró en los temas antibélicos de la novela El corazón de las tinieblas y la película de terror psicológico La escalera de Jacob. Spec Ops: The Line fue un cambio tan radical de la franquicia que recibió críticas muy favorables por su narrativa, pero unas ventas escasas. Aunque se pensó en una secuela durante el desarrollo, 2K decidió que el rendimiento financiero del juego no era suficiente para justificarlo.

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Galaga es uno de los clásicos arcade más emblemáticos de Namco, a la altura de Pac Man y Dig Dug. Fue uno de los primeros shooters fijos en dotar a los enemigos de ataques distintos, como el rayo tractor de la nave jefa. Sin embargo, si se pregunta a cualquier jugador por el shooter Galaxian de 1979, probablemente lo confundirá con su más aclamada continuación. El juego fue un paso adelante con respecto a Space Invaders , pero este último lo eclipsó en ventas. Aparte de Galaxian 3 y Attack of the Zolgear, todas las entregas posteriores se limitarían a mantener el nombre de Galaga, más reconocible.

Castlevania: Symphony of the Night comienza con una pelea de jefes entre Richter y el mismísimo Conde Drácula. Aunque muchos podrían considerar que se trata de una aventura fuera de la pantalla que sirve de prólogo, en realidad es una recreación del combate final de una entrada que técnicamente no llegó a los territorios occidentales.