Bigi, el hijo de Michael Jackson, impugna ante los tribunales el uso del dinero de la herencia por parte de su abuela
Bigi, el hijo de Michael Jackson, ha llevado a su abuela ante los tribunales para impedir que utilice fondos de la herencia de su padre en el marco de una batalla legal.
Bigi -cuyo nombre legal es Prince Michael Jackson III, y también es conocido como Blanket- ha solicitado que se impida a Katherine Jackson utilizar los fondos para financiar su batalla legal contra los albaceas.
Los abogados han dicho que las peticiones de servicios legales de Katherine no benefician a la herencia, por lo que un juez no debería aprobarlas (según USA Today).
Esto se produce después de que la semana pasada se informara de que el hijo de la difunta leyenda del pop iba a presentar una demanda judicial contra su abuela.
Se cree que la presentación responde a la oposición de Katherine al reciente e histórico acuerdo que la herencia alcanzó con Sony para vender la mitad del catálogo musical de Michael por 600 millones de dólares (475 millones de libras).
Se espera que la operación constituya la mayor valoración jamás realizada de los activos musicales de un artista, y las fuentes la cifran entre 1.200 y 1.500 millones de dólares en total (950 millones de libras - 1.190 millones de libras).
Bigi afirmó anteriormente que él y Katherine presentaron sus argumentos contra el acuerdo, pero finalmente el tribunal falló en su contra, lo que aparentemente puso fin al asunto legal.
Sin embargo, en un escrito se afirma que "a pesar de los gastos y las largas probabilidades, Katherine decidió recurrir".
En el escrito judicial se afirmaba que el acuerdo con Sony era "de suma importancia para Bigi, tanto financiera como personalmente", que ha decidido pasar página en la disputa judicial.
Katherine ya había declarado ante el tribunal que Michael nunca quiso que se vendiera su catálogo musical.
La semana pasada, Billboard informó de que Katherine Jackson ha recibido más de 55 millones de dólares (43,5 millones de libras esterlinas) desde la muerte del cantante en junio de 2009, según reclamaciones de la herencia de Michael Jackson detalladas en documentos legales.
Al parecer, los nuevos expedientes pretendían demostrar que la herencia no debía pagar las facturas legales de Katherine.
Los albaceas John Branca y John McClain argumentaron que "prácticamente no se ha declinado ninguna petición de la señora Jackson para su cuidado o manutención".