Brooklyn Nine-Nine: 10 veces que Jake demostró que amaba a Amy

La relación entre Jake Peralta y Amy Santiago, favorita de los fans, se ha ido explorando a lo largo de Brooklyn Nine-Nine, con diferentes grados de ritmo. Son dos personas muy diferentes, con personalidades e intereses distintos, pero su química es innegable, y ambos son detectives excepcionales.

No siempre es tan sencillo como que los dos se gusten y se junten, pero al final lo consiguen, gracias en parte a la persistencia de Jake. Hay varias ocasiones, antes y después de estar juntos, en las que Jake demuestra o expresa lo que siente por Amy.

Cuando Jake está descubriendo e intentando reprimir sus sentimientos por Amy, mientras ella está con Teddy, el equipo organiza un divertido evento de competición cuando el capitán Holt y Terry están fuera de la comisaría, los Juegos Jimmy Jab.

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Jake dice que quiere el número de la amiga de Rosa si gana, pero ella se niega constantemente, diciendo que Jake parece más interesado en coquetear con Amy. Al final, Jake deja que Amy gane los juegos de Jimmy Jab, perdiendo la apuesta y admitiendo ante Rosa que ella tenía razón. Fue en este momento que más y más miembros de los Nueve-Nueve se dejaron llevar por el enamoramiento de Jake, que eventualmente progresaría más.

En el período previo a la boda de Jake y Amy, con una gran cantidad de preparativos aún por hacer, Amy y Rosa se ven repentinamente envueltas en un caso, cuando uno de sus anteriores criminales reaparece.

Jake aprovecha la oportunidad de demostrarle a Amy que es responsable y acepta encargarse de todos los preparativos. Naturalmente, atrae al "marido perfecto" Terry para que le ayude, pero Jake acaba sumergiéndose en el papel de organizador de la boda. Cuando se enfrentan a una mini-crisis, con su duro trabajo en forma de paquetes de regalo encerrados en el monovolumen de Terry, Jake rompe la ventana exclamando "¡Amo a Amy Santiago!". Sus acciones son cuestionables pero es una prueba de su amor por Amy.

Brooklyn Nine-Nine siempre es reconocida por su humor ingenioso y su gran entrega, pero un aspecto de la serie que a menudo se pasa por alto es lo bien que trata temas sociales reales. Uno de ellos es el punto central de un caso en el que Jake y Amy trabajan juntos, relacionado con una supuesta agresión sexual.

Jake se horroriza cuando se da cuenta de lo que muchas mujeres han tenido que pasar en su vida, habiendo sido ajenas e ignorantes a ello todos estos años. Como ama a Amy y quiere entender más, no sólo apoya a su mujer, sino que ve activamente un documental sobre el tema al que el pasado Jake no se habría acercado.

Cuando Amy va de incógnito a la cárcel para acercarse a la hermana de Jimmy Figgis, Maura, con el fin de obtener información sobre los posibles topos en el FBI, se le exige que acuda con frecuencia a un par de médicos para recibir actualizaciones periódicas, siendo los médicos Jake y Charles.

Por puro miedo a que le ocurra algo al amor de su vida, Jake se vuelve sobreprotector, llamando a Amy hasta por la más mínima interacción. Finalmente se excusa del caso por estar demasiado cerca, y a pesar de que frustra a Amy que no la deje hacer su trabajo, ella aprecia el sentimiento.

En "Chasing Amy", Amy enloquece ante la perspectiva de que todo cambie entre ella y Jake si efectivamente aprueba el examen de sargento. Jake se las arregla para mostrar sus excepcionales habilidades detectivescas y la rastrea hasta la azotea donde fueron a su cita de apuestas en la primera temporada.

Consigue calmarla, asegurándole que las cosas irán bien y que tiene que ir a hacer el examen. Cuando descubren que están encerrados allí, Jake incluso se balancea desde el lado del edificio por Amy. Fue un camino pedregoso para llegar hasta allí, pero las acciones de Jake surgieron de las mejores intenciones, demostrando que hará cualquier cosa por ella.

El Buitre fue uno de los principales enemigos del equipo a lo largo de la serie Brooklyn Nine-Nine. Se ganó este apodo por irrumpir constantemente en el último minuto para robar los casos del equipo, llevándose todo el mérito. La situación empeoró cuando se convirtió en el nuevo capitán.

Cuando el Buitre está hambriento de poder, les da un ultimátum a Jake y Amy, diciéndoles que o rompen o renuncian. Cuando sus esfuerzos por frustrar al Buitre se ven frustrados, Jake se niega a romper con Amy y, por tanto, está dispuesto a ser degradado, antes de que Holt salve el día.

Cuando Jake y Amy están todavía en las primeras etapas de su relación, se encuentran con una de sus primeras discusiones y tropiezos propiamente dichos, cuando no están de acuerdo con el colchón de Jake y si debe comprar uno nuevo o no.

Jake no intenta ocultar el hecho de que odia los cambios, por lo que la idea de tener que gastar mucho dinero en un nuevo colchón cuando ya tiene uno, le resulta extraña. En última instancia, es otro caso en el que Jake se da cuenta de que su obstinación por algo tan trivial no tiene sentido en comparación con lo que siente por Amy.

El hecho de que Jake y Amy compitan entre sí de alguna manera comenzó al principio de la serie y se mantiene, incluso cuando están juntos en las series posteriores. En una ocasión, cuando un grupo de reclusos se escapa y el escuadrón tiene que apresurarse a traerlos a todos, Jake y Amy aprovechan esta oportunidad para competir una vez más.

Acuerdan que quien haga más arrestos se quedará con su apartamento y el otro tendrá que mudarse. Jake se muestra obstinado durante casi todo el episodio a pesar de que su apartamento está mucho peor que el de Amy, pero cede mientras compiten por el último arresto, ya que la quiere lo suficiente como para renunciar a su antiguo lugar y aceptar el cambio.

La idea inicial de Jake y el Capitán Holt de hacer una apuesta divertida que implicara un atraco en Halloween, pronto se convirtió en un evento anual para los Nueve-Nueve, apareciendo uno en cada temporada. Era una forma divertida de tener una línea argumental recurrente con respecto a los ganadores del atraco sin exagerar.

En la quinta edición de "HalloVeen", Jake utiliza el atraco como tapadera para encontrar una forma creativa de proponerle matrimonio a Amy, después de que ella se burle de él por ser aburrido y predecible. El plan de propuesta de Jake, que desbarata el verdadero atraco, lo que significa que no hay un ganador real, es una declaración de amor de Jake por Amy en sí mismo, ya que perdió su oportunidad de ganar la competencia real.

Al debatir si tener o no hijos, Jake y Amy, al más puro estilo de Brooklyn Nine-Nine, tuvieron un debate real al respecto cuando trabajaban juntos en un caso en un hospital. Mientras que el debate en sí fue divertido, hecho aún más por la inclusión del capitán Holt, Kevin, y algunos otros moderadores del debate, el tema en sí trajo algunos sentimientos profundos de ambos lados, especialmente Jake.

Al principio se oponía a la idea de tener hijos debido a su traumática infancia, pero finalmente Jake se da cuenta de que, junto a Amy, pueden superar cualquier cosa, así que cede y acepta tener un bebé con Amy.