Christopher Nolan da las gracias a los defensores del desarme nuclear en su discurso de aceptación de los BAFTA
Christopher Nolan aprovechó su discurso de agradecimiento en los premios BAFTA de cine de esta noche para reconocer a las personas que han luchado por el desarme nuclear.
Ganó el premio al Mejor Director en la ceremonia celebrada en Londres esta noche (18 de febrero) por su trabajo en Oppenheimer, una película biográfica sobre Robert J. Oppenheimer, el físico estadounidense de la vida real que desempeñó un papel fundamental en la creación de la bomba atómica en la Segunda Guerra Mundial.
A menudo apodado "el padre de la bomba atómica", Oppenheimer desempeñó un papel decisivo en la creación de las armas nucleares que se utilizaron en los bombardeos de Hiroshima y Nagasaki en 1945, el único uso de armas nucleares en un conflicto armado en la historia de la humanidad.
Nolan subió al escenario del Royal Festival Hall para recoger su premio, e hizo referencia al final de su película, en el que el personaje del título expresa su temor a que su trabajo no haya salvado el mundo, sino acelerado su fin.
"Sólo quiero decir que nuestra película termina con lo que creo que es una nota de desesperación dramáticamente necesaria", dijo. "Pero en el mundo real hay todo tipo de individuos y organizaciones que han luchado largo y tendido para reducir el número de armas nucleares en el mundo".
"Desde su apogeo en 1967, lo han hecho en casi un 90%. Últimamente, eso ha ido a peor. Y por eso, al aceptarlo, sólo quiero reconocer sus esfuerzos y señalar que demuestran la necesidad y el potencial de los esfuerzos por la paz".
Oppenheimer fue la gran triunfadora de la noche en los BAFTA, con un total de siete premios, entre ellos los de mejor película, mejor director y mejor actor para Cillian Murphy. Poor Things quedó en segundo lugar, con un total de cinco victorias, y The Zone of Interest obtuvo tres.
Sophie Ellis-Bextor también subió al escenario de la ceremonia para interpretar su resurgente éxito "Murder on the Dancefloor", que ha tenido un importante revival viral en los últimos meses debido a su inclusión en la memorable escena final de Saltburn, de Emerald Fennell.
