David Fincher dice que no es responsable de cómo interpreta la gente 'El club de la lucha' "No sé cómo ayudarles"

En la película, Edward Norton interpreta a un hombre anónimo y descontento que forma una red clandestina de lucha con reglas estrictas con Tyler Durden (Brad Pitt), quien le convence para ampliar el club y convertirlo en la organización anticonsumista Project Mayhem.

Muchos han observado que la película, basada en la transgresora novela de Chuck Palahniuk de 1996, anticipó el auge de los llamados "incels", abreviatura de "involuntary celibates" (célibes involuntarios), u hombres heterosexuales que creen que su falta de actividad sexual se debe a las estructuras políticas y sociales.

En declaraciones a The Guardian, Fincher declaró: "No soy responsable de cómo interpreta la gente las cosas. El lenguaje evoluciona. Los símbolos evolucionan".

Cuando se le preguntó si El club de la lucha podía verse como una película que apoya la visión del mundo de los incels, respondió: "No la hicimos para ellos, pero la gente verá lo mismo que en un cuadro de Norman Rockwell, o en el Guernica[de Picasso]".

"Me resulta imposible imaginar que la gente no entienda que Tyler Durden es una influencia negativa", afirma. "A la gente que no puede entender eso, no sé cómo responderle y no sé cómo ayudarla".

La última película de Fincher, El asesino, se estrenó en los cines del Reino Unido ayer (27 de octubre), y se estrenará en todo el mundo en Netflix el 10 de noviembre. Está protagonizada por Michael Fassbender, que interpreta a un asesino que se ve envuelto en una persecución internacional tras un golpe que sale mal.

The Killer es la última colaboración de Fincher con Netflix, tras Mank (2020) y su trabajo como productor ejecutivo de House of Cards y Mindhunter.

A la pregunta de si cree que la influencia de los servicios de streaming ha perjudicado el futuro del cine, respondió: "¡No! No. Creo que, aunque sólo sea eso, lo que hemos conseguido es que la barrera entre una historia cinematográfica y un compromiso a largo plazo sea mucho menor."

El director también ha hablado de cómo planteó inicialmente la idea de dirigir una película de Spider-Man en 1999, con la esperanza de saltarse la historia de origen y centrarse en el personaje como adulto. "No les interesó una mierda", dijo.

"Y lo entiendo. Estaban como: '¿Por qué quieres destripar la historia de origen?' Y yo estaba como: "¿Porque es tonta? Esa historia de origen significa muchas cosas para mucha gente, pero yo la vi y me dije: "¿Una araña roja y azul? Hay muchas cosas que puedo hacer en mi vida y esa no es una de ellas".

Fincher también reveló que él y el guionista Aaron Sorkin han discutido la posibilidad de hacer una secuela de La red social, de 2010, sobre el auge de Facebook. "Aaron y yo hemos hablado de ello, pero... eso es una lata de gusanos".