Dragon Ball: 10 tragedias que se evitaron gracias a la mala suerte

El elenco de Dragon Ball ha evitado muchas cosas horribles antes, a menudo gracias a su impresionante habilidad y su asombroso poder. Sin embargo, en más de una ocasión, el mayor factor para detener lo impensable en Dragon Ball ha sido la suerte. La buena suerte (por no hablar de mucho entrenamiento) ha salvado a la banda y a toda la Tierra una y otra vez, y a veces incluso a todo el multiverso de Dragon Ball.

Aunque muchos aficionados recuerdan las victorias épicas y los Kamehamehas, también merece la pena observar cuántos incidentes trágicos no se produjeron gracias a que la fortuna sonrió al Equipo Dragón.

En el primer arco de Dragon Ball, Goku y sus amigos se encontraban en una situación bastante desafortunada, ya que habían sido capturados por el Emperador Pilaf y estaban atrapados en una habitación de la que no podían escapar, es decir, hasta que Goku miró una luna llena y se liberó convirtiéndose en un Gran Simio.

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Sin embargo, como Gran Simio, Goku no tenía control sobre sus acciones, lo que le hacía extremadamente peligroso para todos. Yamcha, sin embargo, recordó que tocar la cola de Goku lo debilitaba, y le dijo a Puar que se la cortara. Yamcha no podía saber con seguridad que al hacerlo Goku volvería a la normalidad, pero su corazonada fue acertada.

Mister Satan había intentado sin éxito destruir a Majin Buu con varias armas, incluyendo chocolate envenenado y una bomba escondida en un videojuego de mano. Sin más opciones, Mister Satán ideó una táctica bastante inusual: simplemente pedirle a Buu que dejara de destruir cosas y matar gente. Cuando Buu explicó que Bibidi y Babidi le habían dicho que la destrucción era una forma de juego, Mister Satán le corrigió, explicando que los magos que le dijeron eso a Buu eran malvados. Valorando la opinión de Mr. Satán, Buu decidió dejar de hacer destrozos y punto, en lo que fue posiblemente la victoria más fácil de Dragon Ball.

El Pez Oráculo que vive en el planeta de Beerus puede ser un aliado extremadamente útil, dada su capacidad de ver el futuro. Por desgracia (e irónicamente), también puede ser bastante olvidadiza. Por suerte, en Dragon Ball Z: Resurrección 'F', el Pez Oráculo recordó algo importante: que Bulma le había dejado un mensaje a Whis. Aunque el mensaje era simplemente que Bulma ofrecía un postre a Whis y Beerus, también llevó a Whis a volver a llamar a Bulma y enterarse de la invasión de Frieza.

En Dragon Ball Super, la suerte también hizo que Whis comprobara los mensajes de su báculo, o más bien el hambre de Beerus, ya que el Destructor ansiaba más de la pizza que Whis había traído de la Tierra.

En general, Goku tiene mucha suerte a su favor, incluso a la hora de encantar a gente peligrosa. A pesar de haber creado el universo, el Omni-Rey también es famoso por borrar cosas a la menor provocación, razón por la que tantas deidades le temen y le tratan con la mayor formalidad. Goku, sin embargo, carece prácticamente de cualquier sentido de la etiqueta. Para su fortuna, su actitud relajada e informal es exactamente lo que le gusta a Zeno, probablemente porque Goku es muy optimista y está prácticamente libre de ego. Hasta ahora, Goku no ha hecho nada que moleste a Zeno o a su yo del futuro, lo cual es muy afortunado, ya que molestar a cualquiera de los dos podría provocar el borrado de Goku o de su universo.

Enfadado por no encontrar al Super Saiyan Dios y por habérsele negado el pudin, Beerus había decidido destruir la Tierra. Sin embargo, Goku retrasó a Beerus convenciéndole de que esperara mientras investigaba más el asunto del Super Saiyan Dios.

Goku invocó entonces a Shenron, quien le explicó que el Super Saiyan Dios era una transformación que se alcanzaba cuando cinco nobles saiyans canalizaban su poder en un sexto. Al principio Goku lo entendió mal, creyendo que sólo se necesitaban cinco Saiyans, pero luego se dio cuenta de que le faltaba un Saiyan. Entonces apareció Videl, que reveló que estaba embarazada de Pan. Así, Videl se unió al ritual del Super Saiyan Dios, permitiendo finalmente a Goku convertirse en un Super Saiyan Dios.

Durante la lucha final con Kid Buu, Vegeta pidió al Kai Supremo, al Viejo Kai y a Dende que desearan la vuelta a la Tierra con las Bolas de Dragón namekianas, junto con toda la gente buena que Kid Buu había matado. Las tres deidades llegaron a Nuevo Namek y se encontraron con que su gente les esperaba y ya habían reunido sus Bolas de Dragón.

Sin embargo, Dende señaló que Porunga sólo podía revivir a una persona por deseo. Sin embargo, Moori, que había reemplazado a Guru como el Namek conectado a Porunga, reveló que un deseo de Dragon Ball namekiano podía ahora traer de vuelta a muchas personas, probablemente porque Moori era más poderoso que Guru.

Si Piccolo hubiera tomado cualquier otro camino para llegar a Gohan, Krillin y Vegeta, no podría haber percibido la energía de Nail, muy debilitada tras una brutal lucha con Frieza. La fusión con Nail permitió a Piccolo manejar fácilmente la segunda forma de Frieza y resistir los ataques de la tercera fase de Frieza que probablemente le habrían matado antes. Si Piccolo no hubiera encontrado a Nail, Frieza probablemente lo habría matado prácticamente sin esfuerzo, desactivando así las Bolas de Dragón de la Tierra y evitando que Shenron resucitara a las víctimas de la Fuerza Frieza. Casi toda la raza namekiana habría permanecido muerta, y Porunga no habría teletransportado a todos los habitantes de Namek a la Tierra antes de la explosión del planeta.

La sincronización de Goku no siempre es perfecta, pero sigue mejorando. En la Saga Saiyan, llegó a la Tierra a tiempo para salvar a Gohan y Krillin de Nappa, pero lamentablemente no pudo salvar a sus otros amigos, que ya habían muerto. En Namek, Goku tuvo la gran suerte de recuperarse a tiempo para impedir que Frieza matara a sus amigos, pero no pudo salvar a Vegeta.

Sin embargo, las siguientes veces, Goku perfeccionó el arte de la salvación a tiempo. Llegó justo cuando Super Buu estaba a punto de destruir la Tierra, se teletransportó a la Tierra momentos después de que Beerus derrotara a Vegeta, y volvió a hacerlo cuando los "luchadores Z" empezaron a luchar directamente contra Frieza en la Resurrección 'F'.

Cuando Trunks partió el cuerpo de Zamasu en dos, destruyéndolo en el anime, la esencia de Zamasu se fundió posteriormente con la Tierra y siguió expandiéndose por toda la realidad. Incluso comenzó a extenderse hasta la línea temporal de la que procedían Goku, Vegeta y Bulma.

Las circunstancias fueron ligeramente diferentes en el manga, donde el cuerpo de Zamasu (que había sido dividido en dos, pero no destruido) comenzó a multiplicarse sin fin. En ambas versiones, sin embargo, Goku, por pura suerte, encontró el botón para invocar a Zeno mientras buscaba una judía Senzu. Más suerte aún, pudo invocar a Zeno del Futuro, a pesar de que Goku lo recibió de Zeno del presente. El Omni-Rey del Futuro detuvo al instante a Zamasu, aunque el universo de Trunks quedó desgraciadamente destruido en el proceso.

Androide 17 parecía bastante decidido a pedir a Super Shenron un viaje en crucero. Sin embargo, cuando ganó el Torneo de Poder, pidió un deseo completamente diferente: que el dragón restaurara todos los universos eliminados durante el torneo.

El cambio de opinión de 17 fue extremadamente fortuito tanto en el anime como en el manga, ya que nadie más había mencionado sus planes de pedir el mismo deseo si hubiera ganado. En el anime, sin embargo, el deseo de 17 también salvó su universo, junto con los exentos de la competición, ya que un deseo egoísta habría convencido a los Zenos de borrar todo lo creado por los Zenos actuales.