La 11ª temporada de 'The Division 2' se retrasa porque Ubisoft se ha quedado fuera del juego
Ubisoft ha anunciado que la próxima temporada de The Division 2 se ha retrasado, debido a un problema que está impidiendo al desarrollador emitir actualizaciones del lado del servidor o del cliente.
En un comunicado publicado ayer (9 de febrero), Ubisoft anunció que, mientras intentaba solucionar un problema de localización que provocó el retraso de la Temporada 11, había encontrado involuntariamente otro error que bloqueaba el sistema de generación de builds del juego.
"Como resultado, no podemos actualizar el juego hasta que este sistema haya sido reconstruido", compartió Ubisoft.
"En el pasado, cuando una Temporada se retrasaba, ampliábamos las actividades de la Temporada anterior", explicó Ubisoft. "Lamentablemente, esto no es posible en la situación actual, ya que no podemos realizar actualizaciones del lado del servidor o del cliente hasta que se restablezca la generación de builds."
Mientras que Ubisoft ha sido capaz de "restaurar aspectos críticos del sistema" durante los últimos cuatro días, The Division 2 está actualmente fuera de servicio por mantenimiento no programado durante aproximadamente tres horas, lo que sugiere que el problema puede haber sido resuelto.
Las notas del parche de actualización no hacen referencia al problema de generación de builds de The Division 2, sino que enumeran una serie de correcciones para mejorar la estabilidad del juego.
"Apreciamos profundamente su comprensión y paciencia y compartiremos los detalles de nuestro plan de compensación en el juego en breve", dijo el estudio, añadiendo que publicará otra actualización sobre la situación hoy (10 de febrero).
No es la primera vez que Ubisoft causa problemas con sus propios juegos. A principios de mes, se informó de que Ubisoft había roto la compatibilidad con Steam Deck en varios de sus juegos -incluido The Division 2- al lanzar una actualización para su lanzador de terceros.
En otras noticias sobre juegos, Ubisoft ha anunciado que colaborará con la policía de Northumbria para hacer frente a los "casos extremos" de toxicidad en los juegos.
