La Guerra de las Galaxias: Las 10 enfermedades más peligrosas

Star Wars: Legends amplía enormemente el mundo creado en el núcleo de la saga Skywalker, incluyendo un increíble nivel de detalle que muy pocos universos ficticios presentan. Una de estas impresionantes leyendas es la extensa variedad de enfermedades existentes en la galaxia.

Esta condición fue utilizada por los científicos imperiales para localizar rincones distantes de la galaxia a través de una impresora ocular especial que fue capaz de descubrir las bases de los rebeldes. Luke Skywalker tuvo que recibir una inyección de suero que lo salvó de la letalidad de sus efectos secundarios.

Otra enfermedad armada que ayudó a los objetivos del Imperio fue el virus Krytos. Fue la causa de la muerte de millones de individuos alienígenas. Sus víctimas experimentaron una muerte horriblemente dolorosa al desintegrarse literalmente su carne en un corto período de tiempo. El virus destructivo se desató sobre Coruscant durante la época de la Nueva República, poco antes de que la facción conquistara la ciudad. El plan del Imperio funcionó a la perfección, la enfermedad sirvió como un caballo de Troya y el estado apoyado por los Jedi pronto sucumbió a la bancarrota.

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Producida por las Grandes Joyas de la Vida, Crimson Forever fue una enfermedad que induce al coma. Las primeras etapas de la enfermedad se asociaron con ojos rojos, seguidas de la víctima mirando fijamente al espacio vacío.

Las últimas etapas incluyeron que la piel de los infectados se volviera casi completamente roja. La condición es tan seria que su único sobreviviente es el poderoso Jedi Luke Skywalker, quien experimentó sueños intensos y más mientras luchaba contra ella.

Terrak Morrhage fue otro Sith que inventó su propia enfermedad mágica para sembrar el caos en la Orden Jedi. La llamó la Peste Oscura y su efecto fue poseer las mentes de las víctimas. El arma era tan fuerte que, incluso después de la muerte del usuario del lado oscuro, continuaba dañando a los Caballeros. Numerosos miembros de la Orden - Padawans y Maestros por igual cayeron bajo su oscura influencia y se volvieron contra sus hermanos de armas.

La llamada bomba de peste propagó una poderosa enfermedad tras el desencadenamiento del arma biológica en una galaxia lejana en una historia del cómic La Guerra de las Galaxias: Jinetes en el Vacío. El único planeta sobreviviente fue completamente consumido por la plaga y su población, completamente destruido. El último miembro sobreviviente de la raza humana escapó en su nave antes de que la enfermedad pudiera matarlo como lo hizo con su tripulación.

Una de las aflicciones más mortales en la historia de la galaxia fue causada por un germen. Sus síntomas incluían el lento deterioro del cuerpo, que conduciría a la desintegración de todo el cuerpo si no se curaba en los tres días siguientes al momento de la infección.

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Especies como los Koboks y los Gaff fueron extremadamente afortunados porque demostraron ser inmunes a la enfermedad. El Imperio no perdió la oportunidad de usar esta enfermedad como un arma también.

Activa en el planeta de Godo y adoptando la forma de nubes rojas, esta aflicción representaba una seria amenaza para los amados personajes de la trilogía original como Han Solo, Chewbacca, el Almirante Ackbar, Lando Calrissian y Luke. Lando se infectó con la enfermedad y Han amenazó con abrir fuego sobre el planeta si no se le proporcionaba a su amigo la medicina necesaria, que le permitiría recuperarse, tal y como se describe en Star Wars 99: El toque de la diosa.

En el universo de la Guerra de las Galaxias, la extensa exposición al desierto llevó a una condición conocida como Pudrición de la Arena. Naturalmente, era una enfermedad muy común en el planeta natal de los Skywalkers, Tatooine. Como muestra el videojuego Star Wars: The Old Republic, el personaje Rowan Delk experimentó un caso de Pudrición de la Arena después de ser sometido al clima abrasador del planeta desierto. Esta aflicción contribuyó en gran medida a la considerable falta de visitantes del planeta.