La película de Super Mario Bros. parece la base de una secuela mucho mejor

The Super Mario Bros Movie es mucho. En 92 minutos, presenta docenas de personajes y montones de localizaciones y no dedica mucho tiempo a desarrollar a ninguno de ellos. La película parece menos una historia sobre Mario y más un reto a los animadores de Illumination para ver cuántas referencias a los juegos de Nintendo podían esconder en un solo lugar, y en ese sentido, lo han conseguido. Sin embargo, a mucha gente parece encantarle la película a pesar de su ritmo vertiginoso y su falta de concentración, y ya está casi garantizada una secuela. Francamente, a pesar de mis quejas, me alegro. Como mínimo, La película de Super Mario Bros es una base excelente para una secuela mucho mejor.

Esta película nos mostró muchas localizaciones: Brooklyn, el Reino Champiñón, las Tierras Oscuras, el Reino Selva, el Reino Nieve, y atisbos de otros lugares como una tierra de Yoshis y el Reino Arena. Irónicamente, el lugar que más vemos a nivel íntimo es probablemente Brooklyn, que es el lugar que requería menos explicaciones. Una secuela es una oportunidad estupenda para reducir el número de localizaciones y dar vida a los lugares en los que se hace hincapié.

¿Cómo funciona realmente el Reino Champiñón? Tenemos emocionantes, aunque algo confusas, vislumbres de cómo es la vida de los habitantes del reino. Sería estupendo poder dedicar tan solo cinco minutos en una secuela a ver cómo Toad se desenvuelve en su vida cotidiana en el Reino Champiñón, para experimentar eso a un nivel práctico que no se veía desde Super Mario RPG en SNES. Y a un nivel muy friki, sería divertido que Nintendo e Illumination encontraran una razón para que haya plataformas flotantes por todas partes.

El segundo tráiler de la película de Super Mario Bros. revela a Peach, Donkey Kong y mucho más

¿Hay una escena postcréditos en la película de Super Mario Bros?

Por otra parte, Illumination podría ambientar una película entera en las Tierras Oscuras, fácilmente. La película de Super Mario Bros demostró que los Huesos Secos pueden ser realmente espeluznantes cuando los animadores con talento se ponen manos a la obra, y el Rey Boo y sus secuaces podrían convertirse en los principales antagonistas de una película sin ni siquiera involucrar a Bowser. La primera película apenas arañó la superficie de lo divertido que es el terror para niños.

Mientras tanto, hace ya un par de años que se rumorea una película de Donkey Kong, así que un vistazo más de cerca al Reino de la Selva parece casi asegurado. Pero la cuestión es que Nintendo e Illumination crearon un montón de mundos absolutamente hermosos para La película de Super Mario Bros, y una secuela podría hacer que parecieran mucho más reales, más allá del impecable CGI utilizado para construirlos.

Sin aventurarnos en el terreno de los spoilers, los arcos argumentales de Mario y Luigi en la película se resuelven de forma bastante simple y conveniente, y muy poco de lo que ocurre en la película contribuye realmente a cómo se resuelven esos arcos en el clímax. Puede parecer una queja, pero en realidad es un intento de elogio: la mayoría de las docenas de personajes no tienen ningún arco argumental. Toad, por ejemplo, no tiene casi ninguna función en la película más allá de la de exponer la trama.

Sin embargo, ahora que La película de Super Mario Bros ha hecho un speedrun de todo el universo de Mario y sus personajes, una secuela puede permitirse ir más despacio, centrarse en un reparto más reducido y explorar la profundidad de estos encantadores personajes. Por ejemplo, en la primera película se insinuaba un misterio sobre los orígenes de la princesa Peach, pero no se utilizaba para dar a conocer a Peach como personaje. Sería estupendo que la secuela profundizara en la psicología de la princesa Peach (en la medida en que lo permita una película para niños con otras obligaciones). Tal y como están las cosas, esta versión de Peach es básicamente una versión Nintendo de la Reina Amidala de Star Wars: La amenaza fantasma, que pide ser explorada más a fondo.

Por otro lado, Toad se ha establecido como un personaje valiente y aventurero que también es diminuto y no hace nada muy importante. En realidad, es una base estupenda para un personaje. Sería muy fácil darle a Toad un arco argumental sobre cómo un pequeñajo puede marcar la diferencia. Por ejemplo, Toad podría convertirse en todo un Capitán Toad para encontrar un MacGuffin que nadie cree que exista, y luego utilizarlo para dar a Mario el poder de derrotar a cualquier villano que aparezca en la secuela. Este tipo de arcos argumentales prácticamente se escriben solos, pero en la primera película brillan por su ausencia.

El mayor reto podría ser cómo seguir desarrollando a Mario como personaje, ya que la primera película básicamente termina con él convertido en el héroe arquetípico que es en los videojuegos. La solución podría ser que Mario no tenga que seguir evolucionando. Al fin y al cabo, Zack Fair es un héroe genérico y arquetípico que consigue seguir siendo muy entrañable. Tal vez Mario pueda seguir siendo encantador y servicial, haciendo avanzar la trama y ayudando a otros personajes a superar sus etapas más importantes.

A todo el mundo le gustan las secuencias de acción bien animadas, pero La película de Super Mario Bros ya tenía suficientes escenas de acción y montajes como para llenar dos películas. Una secuela de Mario es el momento de recuperar el aliento, concentrar su alcance en algo más íntimo y contar la mejor historia de Nintendo jamás contada. La base está ahí. Nintendo e Illumination solo tienen que aprovechar esa oportunidad para hacer de Monty Mole algo más profundo.

(Entonces tienen que hacer una película de Metroid).