Las 10 cosas más conmovedoras de Encanto

Encanto de Disney cuenta la historia de Mirabel Madrigal, una niña sin magia en una familia llena de superdotados. Aunque Mirabel no se siente lo suficientemente digna para formar parte de la familia Madrigal, pronto descubre que es la única que puede salvar la magia de su familia. En el camino, se da cuenta de que su familia no es tan perfecta como pensaba.

Encanto ofrece una hermosa historia llena de magia con personajes entrañables. Además, incluye melodías pegadizas y una reflexión bien elaborada sobre la dinámica familiar, el amor y el peso de las expectativas. Encanto es un cuento que calienta hasta el corazón más frío.

Julieta, la madre de Mirabel, es una mujer bondadosa y cariñosa que tiene la capacidad de curar a la gente con su comida casera. Su don es una metáfora de la creencia de que las madres pueden curar cualquier cosa, especialmente con su cocina. El principal rasgo de Julieta en la película es su instinto maternal.

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Una de las escenas más importantes de Encanto es la de Mirabel hablando con su madre, que entiende que su hija está pasando por un mal momento. Mientras Julieta cura la mano cortada de Mirabel con una arepa con queso, también cura su alma con palabras amables para hacerle saber que es tan especial como cualquier otro Madrigal.

Uno de los detalles más importantes de Encanto es que sirve de carta de amor a la cultura colombiana. No sólo todo el reparto es colombiano o de ascendencia colombiana, sino que los guionistas y productores se aseguraron de mostrar un trozo de Colombia en casi todos los detalles de la película.

Las referencias colombianas se encuentran a lo largo de toda la película: en la ropa, la comida y la biodiversidad. Su música también está llena de géneros latinos. Al igual que Coco con la cultura mexicana, Encanto muestra a Colombia para que el mundo entienda un poco mejor su cultura. Encanto transmite maravillosamente la adecuada representación de los latinos en los medios de comunicación convencionales.

Como Agustín y Félix no son Madrigal de sangre, no tienen dones mágicos como sus parientes. Sin embargo, ambos tienen la personalidad perfecta para sus esposas. Pepa suele ser un manojo de nervios y, como su estado de ánimo controla el tiempo, tiene que reprimir sus verdaderas emociones. Félix es relajado, su carácter divertido le permite equilibrar la ansiedad de su esposa.

El don de Julieta le permite curar a la gente usando comida casera. Su marido Agustín es descrito como propenso a los accidentes, por lo que el poder de Julieta resulta muy útil. Esto es claramente una alegoría de que Julieta y Agustín se complementan como lo hacen Félix y Pepa.

Bruno es la oveja negra de la familia Madrigal. Es un incomprendido con la capacidad de ver el futuro. Como sus visiones suelen ser negativas, opta por abandonar a su familia para dejar de hacerles daño. Esto hace que crezca un mito en torno a su persona, es visto como un villano y un traidor a la familia.

Cuando Mirabel y Abuela Alma hacen las paces, Bruno vuelve dispuesto a defender a Mirabel y a justificarse. En lugar de rehuirlo, la familia Madrigal abraza a "Brunito" inmediatamente. Todo entre ellos está perdonado.

Las enfermedades mentales son uno de los temas más graves que aborda Encanto . Aunque todos fingen estar bien, muchos miembros de la familia Madrigal sufren en silencio. Los dos mejores ejemplos son las hermanas de Mirabel, Isabela y Luisa. Isabela siempre se esfuerza por alcanzar la perfección, aunque no lo desee, y Luisa se ve constantemente empujada a cargar con más de lo que puede.

Tanto Luisa como Isabela son víctimas de las expectativas de su familia. Cuando Mirabel les enseña que está bien dejarse llevar de vez en cuando, ambas aceptan con gusto el consejo de su hermana. Luisa comprende que no tiene que ser la más fuerte e Isabela se da cuenta de que nadie dejará de quererla si no es perfecta. Sus luchas son muy fáciles de entender, por lo que su cambio de actitud es una hermosa lección sobre la autoaceptación.

Justo después de que Casita se desmorone, Mirabel y la Abuela Alma tienen una conversación íntima. Mirabel, junto con el público, se entera de la muerte del Abuelo Pedro. Abuela Alma recuerda su historia de amor con Abuelo Pedro a través de flashbacks. Este es uno de los momentos más conmovedores de la película.

Mientras suena "Dos Oruguitas", el público ve cómo los ojos de Alma y Pedro se cruzan entre la multitud. Los dos personajes se enamoran. Tras casarse, forman una familia juntos. Su vida parece perfecta hasta que la violencia en su pueblo les obliga a abandonar su hogar. Aunque este flashback no tiene un final feliz, los momentos previos a la tragedia tienen un tono reconfortante y edificante.

Abuela Alma es la líder de Encanto, recibe el Milagro que ayuda a su familia y a todo su pueblo. Junto a su familia, se encarga de que todo funcione bien, hasta que Mirabel cuestiona su dinámica y la magia se pierde. Como representación de estos cimientos rotos, su casa se desmorona, dejando a los Madrigal vulnerables.

Al final de la película, todo el pueblo llega dispuesto a ayudar a los Madrigal a reconstruir su casa, demostrando a la Abuela Alma que no tiene que hacerse cargo de todo, liberándola del dolor que lleva arrastrando desde hace décadas.

En la casa de los Madrigal, cada miembro de la familia recibe una habitación que representa su don. Como Mirabel no tiene magia en su interior, duerme en el cuarto de los niños, junto a Antonio, hasta que éste recibe su regalo. En la última escena de la película, después de que los Madrigal reconstruyan la Casita, le dan a Mirabel un nuevo pomo para la entrada principal con una M grabada.

Después de colocar el pomo en la puerta, la magia de Casita vuelve a Encanto. Este momento redime a la familia Madrigal con Mirabel, demuestra que entienden su papel en la familia. Además, esto indica que Mirabel siempre tuvo magia en su interior, sólo que estaba ligada a la propia Casita.

Después de que el Abuelo Pedro muera tratando de proteger a su familia, la Abuela Alma recibe el Milagro en forma de una vela mágica que siempre está encendida. Esta vela es el recipiente de la magia de los Madrigal, por lo que es la posesión más preciada de Abuela Alma. Cuando la llama de la vela se apaga, los Madrigal pierden su don.

Además de ser una representación tangible de la magia del Madrigal, la Vela Milagrosa es una metáfora de muchas cosas. Simboliza la esperanza tras la trágica pérdida del patriarca de los Madrigal. Cuando la abuela Alma se aferra a la magia, también se aferra a la creencia de que su familia siempre estará bien.

Aunque comparten muchas dinámicas disfuncionales debido al trauma intergeneracional, el amor familiar es la trama principal en Encanto. Los Madrigal se quieren, sólo les falta comunicación. Cuando Mirabel señala la magia parpadeante, y la representación concreta de los problemas familiares, todos entran en pánico y comienzan a negarlo. Sin embargo, al enfrentarse a la realidad, comprenden que es necesario un cambio.

Gracias al amor que se tienen, los miembros de la familia Madrigal se esfuerzan por entenderse. Son capaces de perdonar y olvidar en el presente. Además, el amor de Pedro por su mujer y sus hijos les protege mientras son desplazados. Sin duda, lo más conmovedor de Encanto es el amor incondicional entre los Madrigal.