Las 10 historias más importantes de FFXIV para los nuevos jugadores

Final Fantasy XIV lleva más de una década entre nosotros, con una narrativa que se actualiza constantemente y una historia profunda que puede parecer abrumadora desde fuera. No solo es un mundo rico y complejo en el que adentrarse por sí solo, sino que también es la decimocuarta entrega de una serie que lleva en activo desde 1987, por lo que hay algunos pequeños detalles que se espera que los jugadores conozcan desde el principio.

Por suerte, incluso para los jugadores totalmente nuevos en la franquicia, Final Fantasy XIV empieza despacio, y su historia es fácil de digerir en pequeños fragmentos. Desde las calamidades que provocaron que Final Fantasy XIV se reconstruyera desde cero hasta las numerosas organizaciones que intentan mantener la paz y evitar la destrucción, hay partes útiles de la historia que debes conocer antes de sumergirte en Eorzea por primera vez.

La mayoría de los jugadores conocen Final Fantasy XIV como A Realm Reborn, la versión lanzada en 2013 que ha sido aclamada por la crítica. Antes de eso, sin embargo, Final Fantasy XIV se lanzó en 2010 con una serie de problemas en los servidores y en el juego que lo convirtieron en una pesadilla para jugar y fue recibido negativamente por los fans.

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En lugar de simplemente reiniciar el juego sin ninguna explicación dentro del juego, el reinicio de Final Fantasy XIV está integrado en su historia. El inicio de la Séptima Era Umbral fue tan destructivo y poderoso que destruyó por completo el universo original de Final Fantasy XIV , permitiendo su renacimiento como A Realm Reborn.

Final Fantasy XIV tiene lugar en el mundo de Hydaelyn, que puede parecer enorme y abrumador al principio. Los cinco continentes de Hydaelyn son Aldenard, Ilsabard, Othard, Meracydia y el Nuevo Mundo. Agrupados, Aldenard, Ilsabard y Othard se conocen como El Gran Continente.

Eorzea, donde tiene lugar el comienzo de la historia de Final Fantasy XIV, está formada por Aldenard y sus islas circundantes. Solía haber seis ciudades-estado distintas dentro de Eorzea, pero tras el inicio de la Séptima Era Umbral, esto se ha reducido a tres: Limsa Lominsa, Ul'dah y Gridania.

Limsa Lominsa, Ul'dah y Gridania son increíblemente diferentes, cada una con sus propios líderes y forma de hacer las cosas. La arquitectura de cada ciudad-estado también es distinta, lo que le da a cada una un aire diferente, y el trabajo inicial determina en qué ciudad-estado comienza el jugador.

Los jugadores pueden cambiar de trabajo en cualquier momento tras el tutorial básico, y no se tarda mucho en desbloquear el viaje a las otras dos ciudades-estado siguiendo la historia principal. Esto elimina parte de la tensión de esta elección, pero sigue determinando dónde pasarán los jugadores sus primeras partidas, por lo que estudiar de antemano qué estética se adapta mejor a los jugadores resulta útil.

Aunque hay otras creencias religiosas que algunos suscriben, la mayoría de los eorzeanos creen en doce dioses y diosas conocidos simplemente como Los Doce. Está la diosa de la guerra o del amor, y el dios de la destrucción o del conocimiento, y así sucesivamente.

Cada una de las naciones de Eorzea venera a uno de los Doce como su deidad guardiana, y esto es una parte importante de su historia. Es interesante señalar que la influencia de los Doce no se extiende más allá del pueblo de Eorzea, por lo que la gente de fuera tiene sus propios dioses en los que creen o no adoran a ningún dios.

Hay varias razas en Final Fantasy XIV, y las ocho razas jugables se conocen en el universo como las razas errantes. Son los Hyur, Elezen, Lalafell, Miqo'te, Roegadyn, Au Ra, Hrothgar y Viera. Las tres últimas razas se añadieron en expansiones posteriores, y actualmente los jugadores siguen esperando que la hembra Hrothgar sea jugable.

Cada raza tiene su propia historia, y los Hyur prefieren la libertad sin ningún rasgo distintivo. Los Elezen, por su parte, tienen afinidad por la magia y son gente disciplinada que valora el orden. Los jugadores pueden elegir su raza preferida en función de sus preferencias estéticas o de historia.

Los cristales en el universo de Final Fantasy XIV sirven para una amplia gama de propósitos. El más común, y el primero que se presenta a los jugadores, es teletransportarse por Eorzea de forma más eficiente mediante el uso de Aetherytes. Los jugadores tocan estos cristales cada vez que descubren una nueva ubicación, y entonces pueden viajar a cualquier lugar en el que ya hayan estado.

En la historia de Final Fantasy XIV , sin embargo, estos mismos cristales también tienen un propósito más oscuro. Otra versión de los cristales se puede utilizar para invocar Primals, que son horribles amenazas que pueden destruir mundos enteros y debe ser detenido a toda costa. El reino original de Final Fantasy XIV fue destruido por un Primal conocido como Bahamut.

En Final Fantasy XIV existen valientes guerreros que se sacrificaron intentando detener la liberación de Bahamut, que trajo consigo la Séptima Era Umbral. Estos héroes son honrados por los supervivientes como los Guerreros de la Luz, que desaparecieron tras la liberación de Bahamut, aunque nadie recuerda sus nombres ni sus rostros.

El Guerrero de la Luz es un título que se suele otorgar a los héroes más grandes de la historia, y todos los veneran como nobles héroes. A lo largo del viaje del jugador por las numerosas pruebas y tribulaciones de Final Fantasy XIV, también se le otorgará el título de Guerrero de la Luz.

Quince años antes de los acontecimientos de Final Fantasy XIV, la Alianza Eorzeana original se desmoronó, pero fue restablecida hace cinco años con la ayuda de los Guerreros de la Luz. Esta Alianza está destinada a mantener la paz y el orden entre las tres ciudades-estado, y las tres se unen para ayudar a luchar contra cualquier amenaza entrante.

Otras ciudades-estado se unen a la Alianza Eorzeana con la ayuda de los jugadores, y reclutan aliados que también están dispuestos a ayudar sin ser miembros de pleno derecho. La Alianza forma parte de todos los acontecimientos importantes que tienen lugar desde la llegada del jugador, aunque la mayoría de ellos se resuelven principalmente gracias a los esfuerzos del propio jugador.

El mundo de Hydaelyn pasa por eras Astrales y Umbrales, llamadas así por la prosperidad o desgracia que conlleva cada era. El comienzo de cada era Umbral está marcado por una gran catástrofe, y sólo después de que la gente es capaz de empezar a reconstruir las cosas para mejor se entra en una era Astral.

No se sabe mucho acerca de la primera calamidad, pero las calamidades posteriores incluyen grandes inundaciones y terremotos masivos, y son generalmente grandes eventos que causan enormes cantidades de destrucción. El jugador comienza su viaje en Final Fantasy XIV poco después del inicio de la Séptima Era Umbral.

Dado que las eras Umbrales son épocas oscuras marcadas por la calamidad y la destrucción, un grupo conocido como los Vástagos del Séptimo Amanecer trabaja incansablemente para poner fin a esta calamidad. Su objetivo es dar paso a la Séptima Era Astral, que traerá una nueva ola de prosperidad y paz para todos los habitantes de Hydaelyn.

Sus miembros fundadores son el gran Louisoix, Minfillia, Thancred, Y'shtola, Yda, Papalymo, Urianger y Sid. Todos son nombres con los que los jugadores se familiarizarán íntimamente a lo largo de sus viajes, y cada uno representa la esperanza de una era mejor.