Las 13 mejores películas con sorpresa final, los mejores WTF
Nos encanta el cine. Nos flipa que una película se moleste en pensar cómo darnos gato por liebre, como engañarnos y, con un sorprendente giro de los acontecimientos, dejarnos una cara desencajada tras un shock inesperado.
Lo bueno de estos giros es que pueden ser optimistas, pesimistas, terroríficos… no hay género que se libre de un giro final sorprendente. Estas son las 13 mejores películas con sorpresa final, los mejores WTF.
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Sospechosos Habituales (The Usual Suspects)
No fue la primera película de Singer, pero podríamos decir que sí. Sospechosos habituales tuvo el dudoso honor de crear escuela, como harían también Tarantino o Ritchie. Que te guste o no lo que pasó después ya es cosa tuya, pero los valores de la película están ahí, inmaculados. Un truco de magia que aún sigue vigente hoy.
El Imperio Contraataca (The Empire Strikes Back)
Una de las líneas de diálogo más populares, imitadas, explotadas, temidas y adoradas de la historia del cine llegaba al final de este segundo capítulo (quinto) de la saga más popular de todos los tiempos. Una revelación aterradora en el momento menos oportuno volvía la aventura en épica de sangre.
Viernes 13 (Friday the 13th)
La última superviviente de la masacre del campamento respira aliviada en una barca después de ver cómo el verdugo de la primera película terminaba sin cabeza. Ojo, que eso no solo significaba que aún nos esperaba un susto/giro, es que aún había que reinventar la mitología de la película.
The Game
Veinte años se cumplen ya de otro clásico de David Fincher, y al igual que en otra de sus cintas más populares, la primera regla de The Game es no hablar de The Game.
El planeta de los simios (Planet of the apes)
Elegimos la versión de Tim Burton, ya que aún siendo cinematográficamente paupérrima comparada con cualquier otra revisión de la novela original, sí que presentaba un cierre más que digno que, en teoría, daba para una segunda parte mucho más interesante… que jamás se hizo.
El Bosque (The Village)
Si alguien sabe de esto de los giros finales inesperados, es Shyamalan. Con un puñado de obras maestras en el saco, se permitió el lujo de dar otra vuelta de tuerca con su horror social de otra época y un final alucinante.
Scream
Wes Craven reinventó el slasher con unas gotas de metalenguaje y humor, además de un enfoque basado en el formato más Scooby Doo posible. El resultado, una saga, una serie de televisión y uno de los asesinos enmascarados más populares de todos los tiempos. El final, pues eso, puro Hanna-Barbera.
Shutter Island
Cine negro con ambientación de sanatorio y un final para el recuerdo que no desentona ni con la historia, ni con los personajes ni mucho menos con el lugar donde se desarrolla la acción. No lo parece, pero es otro triunfo de Martin Scorsese.
La Huérfana (Orphan)
Serra es un maestro de la puesta en escena con una capacidad innata para tener al espectador pegado a la butaca sin apartar los ojos de la pantalla. A medida que el metraje avanza sabemos que algo está mal en esta historia, pero el desenlace posterior al truco es ejemplar. Una maravilla de horror de serie b como pocas se hacen.
El Club de la Lucha (Fight Club)
Aquí estamos ante otro “esto no es lo que parece” demencial que además añade una serie de capas de valores añadidos a la propia película que la hacen mejor cuanto más la ves. Una película redonda, una oda a la anarquía y a la importancia de poder conciliar el sueño cada noche. Otra obra maestra.
Carrie
Un desenlace del que la citada película sobre campamentos tomará prestado el último truco y que nos sigue dejando con una sensación terriblemente incómoda cada vez que terminamos de ver esta gran película de un gran director basada en la (primera) novela de un gran escritor.
Psicosis (Psycho)
El director se empeñó mucho en que nadie hablase del final de la película cincuenta años antes de la aparición oficial del spoiler.
Psicosis tiene tantas virtudes que, a lo mejor, su sorpresa no es la mayor de todas. ¡Qué final!
Chinatown
Una de las grandes del cine negro terminaba siendo una pesadilla con un spoiler tan sorprendente como desagradable y de extrema incorrección. Claro que no había muchas maneras mejores de poner punto final a una trama detectivesca que, en realidad, era casi una pesadilla.
