Los 10 mejores cómics de Image para los no aficionados a los superhéroes

Cuando mucha gente piensa en cómics, se imagina a héroes superpoderosos con cuerpos imposiblemente idealizados, vestidos con lycras brillantes y ceñidas a la piel, luchando contra villanos monstruosos que amenazan al mundo entero. Marvel y DC, las dos mayores editoriales de cómics, son sin duda especialistas en este tipo de contenido. Para los lectores a los que no les entusiasman tanto los personajes divinos que se pavonean en leotardos, las editoriales de cómics independientes como Image Comics ofrecen una alternativa.

Una de las mejores características del cómic indie es la amplia gama de géneros que pueden abarcar sus historias. Hay cómics independientes de superhéroes, por supuesto, pero esas historias son mucho menos comunes. Más a menudo, los creadores utilizan el cómic indie como una forma de contar historias que no encajan en los universos de superhéroes de Marvel o DC. Las historias publicadas por Image Comics pueden ir del romance al terror, pasando por la ciencia ficción y la fantasía, e incluyen algunos de los mejores cómics del mercado.

Saga es uno de los mejores cómics impresos de cualquier editorial. Desde su publicación, esta historia de género sobre una familia que huye de los horrores de una guerra interplanetaria ha mantenido su increíble calidad, tanto en la narración de Brian K. Vaughn como en el increíble arte de Fiona Staples. Para los fans de la ciencia ficción, la fantasía, el romance o la aventura, Saga tiene un poco de todo.

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El reparto de Saga es increíblemente diverso, con un amplio abanico de razas alienígenas e historias de amor que abarcan parejas mestizas, del mismo sexo y transexuales, y los prejuicios a los que a menudo se enfrentan esas parejas. El cómic no rehúye las realidades gráficas de temas variados como la maternidad o los horrores de la guerra. Y lo que es más importante, los personajes son increíblemente complejos, ya que en un momento dado actúan como héroes y al siguiente como villanos.

Jonathan Hickman es uno de los guionistas de cómics modernos más reputados y, mientras escribía para Marvel, escribió algunas de sus historias más icónicas e innovadoras, como Secret Wars. Sin embargo, el trabajo de Hickman brilla con luz propia en el cómic independiente, donde su creatividad narrativa puede desarrollarse sin las limitaciones de un mundo establecido poblado por superhéroes.

Uno de los mejores títulos de Hickman e Image Comics es East of West. Esta intrigante serie, ilustrada por Nick Dragotta, combina Fantasía Urbana, Ciencia Ficción y Westerns. También sigue a una versión moderna de los Cuatro Jinetes del Apocalipsis a través de una versión futura alternativa de los Estados Unidos. La trama de East of West es intrincada e inesperada, y su protagonista, Muerte, es lo más alejado que se puede estar de los superhéroes tradicionales.

No todo el que tiene una habilidad especial y resuelve crímenes es un superhéroe. En el imaginativo mundo de Chew, escrito por John Layman, el pollo ha sido prohibido debido a un virus aviar mortal, y la FDA son los agentes gubernamentales más poderosos de Estados Unidos. El agente de la FDA Tony Chu puede ver el historial de cualquier cosa que coma, lo que en su línea de trabajo, conduce a algunas experiencias bastante desagradables para el dedicado agente.

El mundo de Chew es increíblemente vibrante e ingenioso, y cobra vida a la perfección gracias a las caricaturescas ilustraciones de Rob Guillory, que a menudo incluyen pequeños detalles humorísticos. Aunque tiene elementos de Ciencia Ficción o Fantasía Urbana, Chew es, en el fondo, una historia de policías colegas, pero con más giros y sorpresas de los que cualquier lector podría predecir.

Para cualquiera que valore la belleza artística en sus cómics, Monstress es una de las historias visualmente más impresionantes de cualquier editorial. Ambientada en un mundo de fantasía inspirado en el Asia de principios del siglo XX, la escenografía de inspiración art-decó y los exuberantes gráficos pintados de Monstress, ilustrada por Sana Takeda, crean un telón de fondo casi etéreo para un contenido de Fantasy Horror realmente perturbador.

La historia de Monstress, narrada por Marjorie Liu, implica una guerra entre una facción de criaturas mágicas llamadas Arcanos, y una facción de humanos que consumen a los Arcanos para potenciar su propia hechicería. En medio está Maika Medio Lobo, que parece humana, pero en realidad es una arcana con un misterioso poder demoníaco. La belleza exterior del mundo y el arte de Monstress contrasta con los horrores de la historia para crear un cómic sin igual.

Chip Zdarsky es actualmente uno de los guionistas de cómics más prolíficos, con títulos que abarcan Marvel, DC e Image Comics. Sin embargo, saltó a la fama inicialmente como dibujante de un título inusual de Image Comics escrito por Matt Fraction, Sex Criminals. Los cómics independientes permiten a los creadores contar historias con un contenido demasiado adulto para las grandes editoriales, y Sex Criminals es uno de los mejores resultados de esa libertad.

En Sex Criminals, los dos protagonistas descubren que comparten la capacidad única de detener el tiempo cuando tienen un orgasmo. Con todo el mundo congelado en el tiempo, la pareja decide utilizar sus poderes para robar un banco. A partir de ahí, la historia no hace más que complicarse. Este cómic es una experiencia de lectura única y tiene el dudoso honor de ser uno de los libros más prohibidos en Estados Unidos.

Descender es la historia de un joven androide que es perseguido por toda la galaxia después de que todos los robots y la inteligencia artificial hayan sido prohibidos. En el mundo de Descender no hay superhéroes. El niño protagonista debe encontrar su camino con la única compañía de su perro robot y un droide minero renegado. La historia emplea el minimalismo típico del guionista Jeff Lemire, y está ilustrada de forma de ensueño por Dustin Nguyen, que ganó un premio Eisner por la serie.

Jeff Lemire ha explicado que el carácter infantil del protagonista fue una respuesta a su conversión en padre, y a los miedos y el deseo de proteger la joven vida que surgieron tras el nacimiento de su hijo. El libro también explora temas complejos en torno al duelo y la alienación que le dan mucha más gravedad que una simple aventura de ciencia ficción.

Muchos aficionados a los cómics juegan a juegos de rol de mesa como Dragones y Mazmorras, y las historias sobre esos juegos a menudo presentan a jugadores corrientes que se ven transportados al mundo de su juego. Este tema común es el núcleo del cómic Die, de Kieron Gillen. Sin embargo, el cómic toma sus raíces fantásticas y las lleva por un camino oscuro, con fuertes elementos de terror y personajes imperfectos que no son todo lo que parecen.

Una de las mejores características de Die es su arte, obra de Stephanie Hans. Todas las ilustraciones están pintadas y su oscura belleza ambienta a la perfección el peligroso reino mágico de la serie. Die es una investigación sobre el vínculo entre el yo adulto y el yo joven de las personas, así como un estudio de los personajes que deben aventurarse de nuevo en un mundo peligroso del que creían haber escapado hace décadas.

El Departamento de la Verdad es un cómic que se siente extremadamente relevante en el clima político actual. En este cómic, cualquier teoría conspirativa puede convertirse en realidad si un número suficiente de personas cree en ella. El cómic explora la naturaleza de la realidad objetiva y la influencia de la propaganda, mientras organizaciones secretas intentan crear y disipar las conspiraciones que se extienden por Estados Unidos.

El arte de El Departamento de la Verdad, de Martin Simmonds, puede ser bastante chocante, ya que evoca la sensación de estar desvinculado de la realidad con sus ilustraciones tipo collage y sus perspectivas sesgadas. Mientras tanto, la historia está tan lejos de los mundos de colores brillantes de los superhéroes como se puede estar, con los personajes y el propio libro jugando con las ideas de la naturaleza misma de la realidad.

Si hubiera algo totalmente opuesto a los cómics sobre superhéroes, podría ser un cómic sobre una escuela de asesinos en prácticas. Uno de los mejores cómics de Image Comics de la pasada década, Deadly Class, escrito por Rick Remender, cuenta la historia de un adolescente huérfano que acaba siendo entrenado en una escuela de asesinos de élite. La naturaleza de los personajes y su profesión hace que el lector no sepa a quién apoyar a medida que se desarrolla la historia, a menudo sombría.

El arte de Deadly Class, ilustrado por Wes Craig, tiene un toque punk que encaja perfectamente con la historia de un grupo de adolescentes inadaptados que viven en las sombras del San Francisco de los años ochenta. La historia es sin duda oscura, pero también aborda temas comunes de la adolescencia y el instituto en torno a la pertenencia y la identidad personal, con los que se puede relacionar mucha gente, a pesar de la naturaleza oscura de esta escuela en particular.

Los procedimientos policiales guardan cierto paralelismo con el género de los superhéroes, que luchan contra los criminales y protegen a los inocentes, pero los héroes suelen ser seres humanos corrientes. Black Cloak es esencialmente un procedimiento policial, pero ambientado en una ciudad moderna inspirada en la fantasía y poblada por elfos y otras razas míticas. Los guardianes de la ley titulares deben resolver el asesinato de un príncipe elfo mientras navegan por complejas cuestiones políticas en torno a su muerte.

Black Cloak, una de las mejores novedades de Image Comics de este año, se aleja de otras historias policíacas tanto por su ambientación mágica moderna como por el uso de personajes no humanos. La historia, de Kelly Thompson, es intrigante y compleja, e incluye giros a lo largo de toda ella. Los cómics están ilustrados con un estilo único por Meredith McClaren, con líneas sencillas y atrevidas que suponen una interesante desviación del estilo tradicional de los cómics de héroes. El resultado es un cómic sobre la lucha entre el bien y el mal, contado de una forma nueva y refrescante.