Los 13 detectives más peculiares del cine
A veces no es necesario ejercer como tal para seguir las pistas de un caso, y trabajos detectivescos o de investigación han sido llevados a cabo por personajes sin licencia o periodistas a los que la imprenta les queda pequeña. Más allá de los relatos clásicos de Bogart, Huston y compañía vamos a optar por otro tipo de detective, a veces tan clásico como ellos, pero siempre desde el otro lado de la fina elegancia. Estos son los 13 detectives más peculiares del cine.
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El detective rockero es uno de los milagros del cine de los 90. Trepidante, divertida, zafia, grosera, idiota, violenta, malhablada… la obra maestra de Renny Harlin producida por Joel Silver (quién si no), se vio favorecida en España por el gran doblaje de Pablo Carbonell, aunque la personalidad de Andrew Dice Clay es tan poderosa que funciona igual (o mejor) en versión original. Una obra maestra tan atemporal como el mejor rock.
Fletch - Fletch, el camaleón
Chevy Chase es uno de los colosos irrepetibles de la comedia de toda la vida. Sea quien sea el director, el tío más borde jamás salido de SNL se apoderaba de las películas de tal manera que lo único que ocupaba el espacio, era él. Aquí, interpretando a uno de sus mejores personajes, era un periodista metido en líos por husmear más de la cuenta. Su segunda parte no era tan brillante, pero forman un programa doble ideal para el fin de semana. Sí, el parecido físico y cómico con Ryan Reynolds es fascinante.
Ace Ventura
La irrupción de Jim Carrey en el olimpo de los dioses de la risa tenía nombre y apellido de un detective… de mascotas. Sus métodos no eran los mejores, pero en el humor todo vale, y cuanto más exceso, mejor.
Gay Perry - Kiss kiss bang bang
La ópera prima de Shane Black tenía a un detective y a un chorizo haciendo equipo en una película absolutamente perfecta. Es posible que el mejor guión del mejor guionista (con permiso de James Gunn) de la industria se lo reservase para él mismo. Sí, un héroe de acción llamado GAY.
Joe Hallenbeck - The Last Boy scout
Lo más parecido a un detective clásico salido de la mente de Raymond Chandler vino de la mente de Shane Blak (quién si no) y con Tony Scott, el hermano más activo y trepidante de la familia. Quién necesita afeitarse cuando puedes dormir entre ardillas muertas.
Frank Drebin - Agárralo como puedas (The Naked Gun: From the Files of Police Squad!)
Qué sería de la comedia sin el enorme trabajo de Leslie Nielsen en las películas de los ZAZ. Aquí adaptaban la serie de televisión pionera sin la que Brooklyn nine nine tampoco habría sido posible.
Terence McDonagh - Teniente corrupto (The Bad Lieutenant: Port of Call - New Orleans)
Si tuviéramos que elegir entre la mayor fricada de cualquiera de los dos responsables de está película (Nicolas Cage, Werner Herzog), no sabríamos elegir rápido. ¿La culpable? Esta especie de revisión del clásico incómodo de Ferrara. Menuda movida tan loca… y molona.
Clouseau - Pink Panther
Aunque el trabajo del gran Steve Martin era tan bueno como de costumbre, el inspector siempre será Peter Sellers. Por favor, mantengan alejado a Roberto Benigni.
Eddie Valiant - Roger Rabbit
Mi película de cine negro favorita. Huston, Walsh y compañía, lo siento. Haber dibujado mejor.
Jimmy Doyle - French connection
Popeye no es un detective cualquiera, es un superviviente. Ya sea en contrabando, persecuciones nunca antes vistas o superando forzosas adicciones a la droga.
Robert Graysmith - Zodiac
Qué difícil elegir a un investigador de este caso real. Qué difícil porque aunque solo uno de los tres es agente de la ley, son los periodistas (un saludo, Fletch) los responsables de llegar hasta el fondo. ¿O no llegaron a ninguna parte?
Philip Marlowe - Un largo adios (The Long Goodbye)
Cruda y humeante, cine negro del bueno, sin disparos, sin acción, pero con un personaje inmortal: Philip Marlowe.
Un detective loser, gente chunga, bolleras hippies, gatetes cabrones, perros fieles, réplicas antológicas, Arnold Schwarzenegger y mil cigarrillos.
Creo que cuando somos jóvenes todos queremos ser El Último Boy Scout, pero a medida que nos hacemos mayores queremos ser Elliot Gould.
Maurice L. Pogue - Borrón y cuenta nueva (Clean Slate)
Seis años antes de Memento el Garth de Wayne’s World ya perdía la memoria cada día. Y eso no es fácil de llevar cuando eres detective privado. Una delicia.
