Naruto: Los 7 primeros personajes que mató Madara Uchiha (en orden cronológico)

Madara Uchiha fue uno de los mayores antagonistas de la serie Naruto. Nacido durante la Era de los Estados Combatientes, luchó en innumerables batallas y llegó a lo más alto, rivalizando con gente como Hashirama Senju, el Dios de los Shinobi, en el proceso. Como villano, no hace falta decir que Madara Uchiha ha cometido un montón de actos atroces, que van desde manipular a otros hasta matarlos.

Para ver cumplido su objetivo de lanzar el Tsukuyomi Infinito sobre el mundo entero, Madara mató a miles de los que se interpusieron en su camino a lo largo de los años.

Madara fue el primer usuario del Mangekyo Sharingan después de Indra Otsutsuki, junto con su hermano Izuna Uchiha. Según Obito, Madara y su hermano solían entrenar juntos para perfeccionar sus habilidades. Tras darse cuenta del verdadero poder del Sharingan, los dos mataron a sus mejores amigos y obtuvieron una destreza visual sin igual, que Madara utilizó para convertirse en el líder del clan.

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Se desconoce a quién mató exactamente Madara para hacerse con este poder, pero sin duda fue alguien muy cercano a él, o el Mangekyo Sharingan no se habría despertado.

Madara nació en una época de guerra en la que los Senju y los Uchiha estaban enfrentados. Con Tajima Uchiha, Madara aprendió a enfrentarse a los Senju. A pesar de estar muy unido a Hashirama, Madara no dudó en luchar e incluso matar a los miembros del clan Senju si era necesario.

Durante la época en que Madara y Hashirama salían de niños, el primero luchaba activamente contra los Senju, según confirmó el padre de Hashirama, Bustuma Senju. Según Butsuma, Madara era un shinobi de increíble talento que había derribado a varios miembros del clan Senju sin esfuerzo. Al crecer, participó en innumerables batallas contra los Senju hasta llegar a su punto más fuerte, pero finalmente fue derrotado por Hashirama una vez más.

En la Tercera Gran Guerra Ninja, Rin Nohara fue apuñalada en el pecho por Kakashi Hatake, pero su muerte fue causada en realidad nada menos que por Madara. Al secuestrarla y convertirla en la Jinchuriki de las Tres Colas, Madara pretendía poner en marcha su plan para que Obito se convirtiera en su subordinado.

Tras convertir a Rin en una Jinchuriki y hacer que los shinobi de Kirigakure la persiguieran a ella y a Kakashi, Madara apostó por el hecho de que Rin se mantendría fiel al código shinobi y se suicidaría antes de hacer daño a Konohagakure. Eso es exactamente lo que hizo cuando saltó delante del Raikiri de Kakashi y murió. Asegurándose de que Obito fuera testigo del suceso, Madara lo utilizó para traumatizarlo y utilizarlo como peón.

Madara regresó utilizando el Edo Tensei durante la Cuarta Gran Guerra Ninja e inmediatamente dio a los fans una idea de lo que era capaz. Utilizando sólo taijutsu y kenjustu, Madara fue capaz de matar a varios shinobi sin esfuerzo. Es más, llegó a aprovechar el poder del Rinnegan y derribó dos meteoritos, aplastando a numerosos shinobi.

Incluso Onoki, el Tercer Tsuchikage de Iwagakure, quedó atrapado en el ataque y fue gravemente herido. Toda la Cuarta División sufrió pérdidas masivas durante la guerra, todo debido a la legendaria fuerza de Madara.

Mabui era una kunoichi de Kumogakure conocida por ser extremadamente hábil en las artes ninja, como se espera de un Jonin. Sus habilidades la habían convertido en la asistente del Cuarto Raikage, Ay. Durante la Cuarta Gran Guerra Ninja, Mabui pasó la mayor parte del tiempo en el Cuartel General de la Alianza Shinobi, donde apoyó tanto a la división de Sensores como a la de Inteligencia del grupo.

A pesar de ser bastante fuerte, Mabui estaba indefensa ante el poder de Madara y los Diez Colas. Usando el poder de la bestia, Madara fue capaz de matarla en un instante, y al hacerlo, afectó bastante a la salida estratégica de la Alianza.

Inoichi era uno de los ninjas de tipo sensor con más talento no sólo de Konohagakure, sino de todo el mundo. Utilizando sus poderes, podía formar un enlace eficaz entre el cuartel general de la Alianza Shinobi y los que luchaban en el campo de batalla.

Al darse cuenta de que era una espina, Madara decidió acabar con él con una Bomba Bestia de Cola utilizando los poderes de las Diez Colas. Inoichi no tuvo ninguna oportunidad contra la bestia y murió en la enorme explosión que envolvió todo el cuartel general. Antes de morir, le confió todo a su hija, Ino Yamanaka.

Shikaku Nara fue el estratega jefe de las Fuerzas Shinobi Aliadas durante la Cuarta Gran Guerra Ninja. Al ser el responsable de todas las estrategias inteligentes que desplegó la Alianza Shinobi, fue fácil para Madara ver que él era el cerebro de toda la operación. Madara decidió acabar con Shikaku utilizando el poder de las Diez Colas y lo consiguió tras varios intentos. Poco antes de morir, Shikaku protegió a toda la Alianza Shinobi con su última estrategia y dejó el resto a su hijo, Shikamaru Nara.