¿Podrá Jason Statham contra un tiburón de 25 metros?
Uno de los enfrentamientos más esperados por los aficionados al terror, en este caso del terror submarino, es que enfrentará a Jason Statham contra un tiburón de 25 metros.
La adaptación de MEG, la primera novela de la saga creada por Steve Alten, ha finalizado su rodaje en China y Nueva Zelanda, así que ahora es el momento de que la productora invierta parte de sus 150 millones de dólares de presupuesto en crear al monstruo prehistórico ideado por el autor de la trilogía Maya o El Lago, que sobrepasa los 20 metros y hará que el tiburón de Spielberg parezca Dory.
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La producción ha sufrido algún que otro varapalo, principalmente en lo relativo al director. En un principio Eli Roth, que no termina de levantar cabeza, fue el elegido, pero abandonó el proyecto cuando estaba a punto de iniciarse el rodaje por las clásicas diferencias creativas.
Quien ha rodado la película ha sido Jon Turteltaub, uno de esos hombres invisibles que lo mismo te sirve para un roto que para un descosido. Director de las dos partes de la simpática La Búsqueda, con Nicolas Cage, Turteltaub no se caracteriza por saber dotar de especial agilidad a la acción, aunque habrá que ver si eso es cosa de Jason Statham, Ruby Rose y Rainn Wilson, tridente de lujo para hacer frente a una bestia de la naturaleza que se creía extinta y que sube a la superficie para convertirse en una seria amenaza mundial.
Según el propio Alten, “En primer lugar, esto no es sólo un tiburón, es un Megalodon, el depredador más temible de la historia del planeta ... que es una versión prehistórica de un gran blanco de 25 metros.
Añade a eso los mejores efectos especiales, un presupuesto de $ 150 millones, un gran guión y un elenco internacional de estrellas ... liderado por el tío perfecto para interpretar a Jonas Taylor, Jason Statham ‘'.
Submarinos desaparecidos, megalodones, un montón de efectos especiales y la seguridad de saber que, tras la fabulosa The Shallows, los escualos siguen siendo el material perfecto para las pesadillas de los espectadores de todo el mundo.
Para los que tenemos fobia a los escualos, es material de primera. Sus novelas, aunque cada vez más ciencia ficción, son un excelente pasatiempo, sobre todo la primera. Nos pone los dientes más largos que los de MEG.
A ver quién duerme antes y después de ver a Jason Statham contra un tiburón de 25 metros.
