Resumen de la Ceremonia de Clausura de los Juegos Olímpicos

No nos perdimos la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos por Paul McCartney y aguantamos el randomerismo de la de clausura por los Who, que quede claro, pero el caso es que nos la tragamos enterita y creemos que también se merece un resumen tróspido.

MAL

1. Emelí Sandé, que aburre una barbaridad esta chica y que no le vemos la gracia por ningún lado. 

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2. Los comentaristas de TVE, a los que alguien debería decirles que saber callarse en los momentos oportunos es una virtud. E informarse también.

3. Que no saliera Kate Bush en persona y pusieran en su lugar un remix de Running Up That Hill, muy feo.

4. Eso de poner unos segundos de varios temas de David Bowie sabiendo que él no iba a salir es de calientabraguetas y calienta horcates.

5. El mezcle Kaiser Chiefs/The Who, Ed Sheeran/Pink Floyd y Jessie J/Queen nos pareció una aberración de la naturaleza. Cada cosa en su sitio y los petardos con sus petardadas, pero no me vendáis a los Kaiser como mods, a Ed Sheeran no me lo pongáis a cantar Wish You Were Here con el batería de Pink Floyd y, por Dios, no sustituyáis a Freddie por una señorita que dentro de dos años va a a estar acabadísima.

6. El hecho de que tocara Liam Gallagher con su mediocre grupo Beady Eye cantando una canción de Oasis que encima había compuesto su hermano Noel es de vergüencita ajena.

7. Taio Cruz. Todo él.

BIEN

1. Da gusto ver en directo a Ray Davies, de los Kinks, a pesar de parecer un muñeco de cera que estaba a punto de derretirse si se movía mucho. 

2. Annie Lennox, a pesar de la horterada de puesta en escena -aunque nos parece fetén eso de los miriñaques- sigue siendo una señora magnífica encima de un escenario.

3. Fatboy Slim puesto hasta el culo de ácido y subido encima de un pulpo hinchable fue un espectáculo maravilloso.

4. Quien no se emocionara viendo a las Spice Girls es que no tiene alma o sabe fingir estupendamente, porque la yo de mi infancia estaba desatada con el Wannabe.

5. Adoramos a Eric Idle y adoramos a los Monty Python y sí, nos descojonamos con el numerito ridículo que hizo, tan viejuno y tan majo él.

6. Muse, por muy ultra pomposos que sean, siguen siendo una delicia en directo, las cosas como son. Nosotros hasta le hemos cogido el gustico a Survival.

7. The Who inmensos, tremendos. Cómo sigue cantando el muy cabronazo de Roger Daltrey y qué majo Zak Starkey, el hijo de Ringo Starr, a la batería.