10 mejores viñetas del manga Hunter X Hunter

Hunter X Hunter es un manga muy popular escrito e ilustrado por Yoshihiro Togashi que se publica por entregas desde 1998. La historia sigue a Gon Freeccs, un joven que intenta estar a la altura de la reputación de su padre como cazador de monstruos de fama mundial, junto con varios amigos que conoce a lo largo de su peligroso viaje.

Aunque el manga lleva en pausa desde 2006 debido a la larga enfermedad de Togashi, Hunter X Hunter sigue teniendo algunas de las ilustraciones más impresionantes que se recuerdan. Los mejores y más llamativos paneles artísticos llevan el estilo característico de Toagshi, dicen algo sobre los personajes y proporcionan emociones viscerales que los lectores pueden volver a ver con el paso del tiempo.

Uno de los mayores puntos fuertes artísticos de Toagshi es la transición fluida de un impresionante panel de manga al siguiente. En un gran ejemplo, Togashi ilustra las cadenas de Karupika fluyendo subliminalmente en cada panel que establece un vínculo directo con la acción representada.

Hunter X Hunter: 10 cosas que sólo los fans del manga saben de Gon

Hunter X Hunter: 10 cosas que sólo los fans del manga saben sobre Killua

A pesar de que parece que las cadenas se entremezclan en cada panel, están dibujadas por separado, lo que indica la sutil habilidad de Toagshi. Más allá de la brillante metáfora de las cadenas que enlazan la acción, el contraste entre el blanco y el negro es notable. La forma en que Togashi traza líneas diagonales de izquierda a derecha en la parte superior y de derecha a izquierda en la inferior también crea un contraste visual sorprendente que es difícil no apreciar.

A pesar de todas las elaboradas ilustraciones y perspectivas a escala de Togashi, a veces son sus diseños sencillos los que más destacan. No hay más que ver la bella imagen yuxtapuesta de Gon y Killua, dos de los personajes más fuertes de Hunter X Hunter. El primero aparece con el pelo negro azabache y un top blanco, mientras que el segundo luce el esquema cromático opuesto.

Aunque engañosamente simple, la obra de arte más memorable de Togashi también comenta la propia narrativa. Teniendo en cuenta lo que ocurre entre Gon y Killua durante el intenso arco de la Quimera Gigante, es como si Togashi estuviera presagiando los acontecimientos de la historia con esta imagen magníficamente compuesta y perfectamente construida de dos personajes afines pero diferentes.

Hunter X Hunter no sería nada sin sus terroríficos monstruos que conducen la acción, amenazan a Gon e inyectan una emoción visceral en los lectores. Sabiendo esto, Togashi se superó a sí mismo con una imagen de un monstruo repugnante en un cuadro que salta del encuadre con una tridimensionalidad de infarto.

La escalofriante técnica de romper paneles fue una de las primeras señas de identidad del estilo de Togashi en el querido manga, que poco a poco sería sustituida por más bocetos y sombreados. Una cosa es que un personaje salte fuera del panel principal, pero utilizar un cuadro enmarcado dentro del panel al principio es una forma inspirada de hacer que parezca que el amenazador monstruo se abalanza de verdad hacia sus antiguos colegas.

Cada vez que Ugovin hace una aparición, parece como si Togashi le dedicara un cuidado especial y detalles intrincados. Un ejemplo clásico de ello es la vez en que el enorme miembro de la Phantom Troupe se llevó una bala entre los dientes, sonrió como si fuera el Joker y golpeó con fuerza la cabeza de un enemigo hasta romperle el cuello.

El cambio de perspectiva de un sorprendente primer plano de Ugovin a un plano medio de Ugovin pasando su musculoso bíceps por el encuadre y luego a un plano largo de una multitud de espectadores jadeantes es un golpe maestro en la narración visual. El contraste en blanco y negro, perfectamente equilibrado, hace que destaque el encuadre sucesivo a derecha, centro e izquierda de cada panel.

Cada vez que Ugovin aparece luchando, suele ser un acontecimiento espectacular. En los capítulos 75-77, uno de los mejores combates de la serie se produce cuando Ugovin se enfrenta a la Bestia Sombría Gusano en una batalla épica que muestra el impecable nivel de detalle que Togashi suele dar al personaje.

Tras un plano de establecimiento bastante ordinario que muestra al Gusano preparándose para atacar, la imagen central del panel es profundamente perturbadora por su exquisito detalle y espectacular sombreado. Con su clásico método de romper paneles, la imagen de Togashi del puño de Ugovin atravesando el cuadro con su puño y asestando un golpe a la bestia es literalmente alucinante. Los contornos dinámicos del fondo transmiten el ímpetu del golpe.

Los fans deHunter X Hunter saben muy bien cuánto le gusta a Togashi ilustrar decapitaciones espeluznantes. Aunque no faltan opciones decentes entre las que elegir, hay algo especialmente desconcertante en la forma en que los novedosos bocetos y el violento trabajo de Togashi representan la brutalidad de Feitan.

Más allá del minucioso detalle del cabello de Feitán, la composición hace que el ojo del espectador recorra la imagen de derecha a izquierda. Comenzando con un primer plano de Feitan en el lado izquierdo del encuadre, los contornos de su túnica fluyen hacia las piernas de sus cinco víctimas decapitadas. Togashi ha recibido críticas rabiosas por la forma en que su estilo artístico evolucionó (o involucionó) debido a su enfermedad, pero este panel demuestra lo bien que puede funcionar cuando se hace bien.

Las moscas simbolizan a menudo la muerte y la decadencia. Como una forma innovadora de presagiar el brutal asesinato de una de las víctimas de Illumi en el anime de larga duración que aún ven los fans, Togashi comienza uno de sus mejores paneles con la imagen de una mosca en el globo ocular de un mafioso. La mosca se aleja rápidamente, sugiriendo que el mafioso ya no está en peligro.

Por el contrario, el siguiente panel muestra al mafioso de perfil mientras una lluvia de alfileres de Illumi le penetra por la nuca con la palabra "Doom", que hace las veces de efecto sonoro para romper el panel. Aparte de la brillantez de utilizar el simbolismo de la mosca, el montaje clásico y el despiste se asemejan a la promesa, el giro y el prestigio de un mago. Adormece a los espectadores haciéndoles pensar una cosa, para luego darles la contraria, lo que constituye una narración magistral.

Uno de los paneles que se repite una y otra vez entre los fans de Hunter X Hunter es el detallado rostro de Karupika en el capítulo 101. Precursor infame del impactante panel que aparece en el último arco Hunter X Hunter, la imagen de una víctima con los ojos abiertos de par en par por el terror mientras un sudor frío recorre su rostro da paso a un momento aún más escalofriante.

El encuadre asimétrico de la imagen desorienta inmediatamente a los lectores e indica subliminalmente que algo va mal. Sin embargo, lo que realmente llama la atención es el detallado sombreado del rostro de Karupika. La mitad derecha de su rostro está expuesta a la luz, y la otra queda bañada por la sombra, lo que le confiere un aspecto yin-yang a lo Jekyll y Hyde que encapsula a la perfección su personalidad.

Sin duda uno de los paneles más icónicos de la historia de Hunter X Hunter, la transición completa de Gon en el capítulo 306 es material de leyenda. De perfil, flexionando el bíceps izquierdo y mirando hacia abajo con curiosidad, la cruda imagen capta el inmenso poder de Gon, así como su tristeza subyacente. La dicotomía está representada maravillosamente.

El impresionante panel independiente también fusiona lo mejor de las divergentes técnicas artísticas de Togashi. Gon está adornado con el detallado trabajo de trama y los intensos bocetos que caracterizan la obra posterior de Togashi. Sin embargo, el exuberante contraste en blanco y negro de los bordes enmarcados remite al estilo original de Togashi. Cuando se combinan, la transformación de Gon se convierte en algo verdaderamente trascendental.

Podría decirse que el panel más detallado de Togashi aparece cuando Ikalgo expresa su deseo de encontrar a Palm y rescatarla antes de que sufra daños. Cuanto más se contempla el torbellino de imágenes, más hipnotizado se queda uno por la vasta red de abstracción.

Al incluir las burbujas de texto "Quiero salvarla" y "No se trata de la misión o el deber", Togashi proporciona una visión directa de la mente de Ikalgo en formas que se representan visualmente. Las divagaciones caóticas de una mente obsesionada no podrían ilustrarse con mayor precisión y eficacia, lo que demuestra una vez más que las imágenes de Togashi tienen un peso temático que refuerza la narrativa y los rasgos de personalidad de sus personajes.