10 veces que los protagonistas del anime se rinden

La única cosa que es consistente entre todos los personajes de anime (especialmente del género shonen) es que todos ellos son simplemente incapaces de rendirse, incluso cuando las probabilidades están en su contra. Por eso sorprende que, de vez en cuando, los aficionados se encuentren con un personaje que hace exactamente lo contrario: se rinde.

Ahora bien, "rendirse" puede ser interpretado de diferentes maneras por diferentes personas, y muchas de esas interpretaciones serán enumeradas en la lista que sigue. Ni que decir tiene que muchas de estas entradas incluirán también enormes spoilers.

Yuuichiro y sus amigos huérfanos fueron capturados por los vampiros y tratados como ganado. Cuando intentaron escapar, fueron inmediatamente capturados por Ferid. Uno por uno, los mató a todos delante de Yuuichiro, que de alguna manera logró escapar.

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Años después, el daño psicológico era evidente. Creció como un "lobo solitario" que nunca se molestó en crear vínculos significativos con nadie.

Después de ver morir a su hermana delante de sus propios ojos, algo dentro de Yuu se rompió. Renunció a vivir su vida y, en su lugar, simplemente empezó a existir.

Se encerró en sí mismo, comía ramen a todas horas, apenas dormía y salía todas las noches a pelear con alguien para sentirse vivo. De hecho, en un momento dado, llegó a considerar la posibilidad de drogarse para aliviar su dolor.

Desde el momento en que Satou fue presentado en el anime, era evidente que había renunciado a convertirse en una parte productiva de la sociedad humana. Era el típico "hikkimori" que se pasaba todo el tiempo dentro de su habitación frente al ordenador.

Sus habilidades sociales eran inexistentes y vivía del dinero que le daban sus padres. Su falta de socialización le llevó a convertirse en un paranoico de 22 años.

En un mundo en el que todos poseían Quirks, convertirse en un superhéroe era algo con lo que todos los niños soñaban. Lo mismo le ocurría a Deku, pero sus sueños se vieron truncados en el momento en que un médico le dijo que era una de las pocas personas sin Quirks que habían nacido.

Como era de esperar, Deku pasó mucho tiempo llorando y abatido, al ver que tenía que renunciar al sueño de superhéroe que tanto ansiaba.

Nozaki se muestra como un joven extremadamente denso, hasta el punto de que cuando Chiyo le confiesa sus sentimientos, él asume que estaba halagando su trabajo de manga. Cuando Chiyo se da cuenta de este malentendido, le hace creer que es su fan.

Así, acabó convirtiéndose en su asistente de arte y, finalmente, en una confidente cercana. Chiyo fue lo suficientemente inteligente como para saber desde el principio que Nozaki nunca correspondería a sus sentimientos, y renunció a involucrarse con él románticamente.

El amor de Mikasa por Eren no era un secreto. El pañuelo rojo atado a su cuello es prueba de ello, así que no fue una sorpresa cuando Mikasa se sorprendió de que Eren hubiera "muerto" durante una batalla con un titán.

Lo que sí fue un shock fue lo claramente que ese incidente la desquició. Fue a la batalla con un solo objetivo en mente: morir mientras luchaba contra todos los titanes que pudiera.

Cuando se trata de ideologías diferentes, es casi imposible llegar a una conclusión. Senkuu quería revivir a todos los humanos que pudiera, independientemente de quiénes fueran. Tsukasa sostenía que sólo debían revivir los puros.

Fue entonces cuando Senkuu empezó a creer que Tsukasa no era más que un asesino que tenía convicciones muy fuertes. Así que renunció a convencerle y optó por huir de él.

Los dos chicos iban en una moto, que colisionó con un coche que venía en dirección contraria. Natsusa salió despedido en la carretera y, a consecuencia de las graves lesiones, le dijeron que no podría volver a jugar al rugby.

A pesar de que el accidente no fue culpa de Ibuki, se culpó de lo que le ocurrió a Natsusa. Como penitencia, él mismo renunció a volver a jugar al rugby, para poder sentir el mismo dolor que sintió Natsusa cuando se vio obligado a abandonar el rugby.

En una de las peleas más largas de la serie, a Inosuke le resultaba cada vez más difícil matar al demonio padre araña. Aunque al principio tenía ventaja sobre los demonios, las tornas pronto se volvieron contra él.

En un momento dado, Inosuke se rindió, pero recordó la fe que sus amigos tenían en él y luchó contra el demonio. Sin embargo, cuando el demonio finalmente lo atrapó y comenzó a asfixiarlo, Inosuke aceptó el hecho de que moriría pronto. Entonces dejó de luchar.

Se convirtió en el chivo expiatorio de su clase después de que se le achacara el acoso de Nishimiya. Fue rechazado, se burlaron de él y él mismo fue acosado. Esto tuvo un efecto perjudicial y duradero en su estado mental y psicológico.

Se volvió retraído, dejó de hacer amigos y finalmente se aisló por completo. Esto se prolongó durante más de una década hasta que encontró la redención en su eventual amistad con la propia Nishimiya.