Naruto: 10 formas en que Tobirama Senju fue el peor Hokage

Tobirama Senju era el hermano de Hashirama, el Primer Hokage de Konohagakure. Tras la muerte de su hermano, el manto del Hokage pasó a sus manos y se convirtió en el Segundo Hokage. Tobirama era un shinobi que hacía tanto el bien como el mal, como la mayoría de los demás Hokage.

Si bien algunas de sus acciones ayudaron a Konohagakure a progresar bastante, también tomó algunas decisiones que acabaron persiguiendo no sólo a Konohagakure, sino también al resto del mundo shinobi deNaruto durante generaciones.

Tobirama Senju no sentía aprecio por los Uchiha desde la Era de los Estados Combatientes. Aunque su odio hacia sus enemigos estaba justificado en ese momento, cuando se convirtió en el Hokage, debería haber sido capaz de mirarlos de otra manera.

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Su desconfianza en el Clan Uchiha sembró la semilla de los problemas que surgirían años después y que perjudicarían a la aldea de formas inimaginables para él en ese momento.

Antes de morir, Hashirama le dijo a su hermano que no maltratara a los Uchiha, pero evidentemente, Tobirama no escuchó el consejo. Después de que la autonomía de los Uchiha fuera desafiada, el clan trató de resistirse, lo que no le sentó bien a Tobirama.

En un intento de pacificarlos, Tobirama quería ponerlos a cargo de la Fuerza Policial de Konoha y controlarlos mejor. Aunque se pensaba que la fuerza policial era un poder, en realidad, no eran más que peones.

Tobirama, siendo el Hokage, fue una inspiración para innumerables shinobi, aunque sus formas de línea dura perpetuaron el odio más que nada. Mientras que Hiruzen Sarutobi se consideraba un equilibrio entre Hashirama y Tobirama, otros, como Danzo, tomaron ideas de su ideología y las tergiversaron en algo aún peor.

En consecuencia, Danzo perjudicó a la aldea y a su relación con el resto del mundo cuando se le otorgó todo el poder.

El trato que Tobirama daba a los Uchiha los alienaba y hacía que no se sintieran queridos en la aldea. Incluso antes de convertirse en el Hokage, intentó contenerlos aconsejando a su hermano contra ellos.

Cuando estaba en el poder, Tobirama hizo todo lo posible para mantener a los Uchiha bajo control, lo que finalmente se tradujo en la Masacre del Clan Uchiha durante el reinado de su sucesor, Hiruzen Sarutobi.

Hashirama y Madara crearon la aldea de la Hoja Oculta para evitar que los niños sufrieran en el campo de batalla y vivieran felices. Sin embargo, las políticas de Tobirama hicieron exactamente lo contrario para los Uchiha.

A niños como Shisui e Itachi se les hizo sufrir por el bien de la aldea. A otros, como Sasuke, les quitaron su infancia y la mayoría fueron simplemente asesinados, todo porque Tobirama no podía amarlos ni confiar en ellos.

Tobirama fue un inventor increíble y desarrolló innumerables y poderosos Jutsu, pero uno que nunca debió crear fue sin duda el Edo Tensei. El Edo Tensei nunca pudo ser utilizado para el bien y, en cambio, permitió a Orochimaru atacar Konohagakure y matar a Hiruzen Sarutobi.

Kabuto tomó este Jutsu y lo utilizó en la Cuarta Gran Guerra Ninja, lo que provocó la pérdida de innumerables vidas de shinobi.

Como Hokage, Tobirama debía ser lo suficientemente poderoso como para defenderse a sí mismo y a la aldea de sus enemigos, pero no logró solidificar las relaciones con otras naciones.

En uno de sus encuentros con el Segundo Raikage intervinieron los hermanos Oro y Plata y, cuando se enfrentaron, Tobirama quedó a las puertas de la muerte. Más tarde, fue asesinado por Kinkaku durante la Primera Gran Guerra Ninja.

Si el Edo Tensei no fuera suficiente, Tobirama siguió desarrollando otros jutsu, como el Jutsu de Clones de Sombra Múltiples o la técnica de las etiquetas de papel que explotan mutuamente, que más tarde se consideró demasiado peligrosa para ser utilizada.

Estos Jutsu fueron clasificados como Prohibidos ya que podían dañar al usuario. Sabiendo eso, Tobirama nunca debió haberlos creado en primer lugar.

Madara Uchiha se convirtió en uno de los principales antagonistas de la historia sólo porque Tobirama permitió su regreso al crear el Edo Tensei. Una vez más, su jutsu puso al mundo en grave peligro y casi destruyó la vida en el planeta.

Madara Uchiha incluso agradeció a Tobirama por crear dicho Jutsu y ayudarle a tener éxito en sus objetivos al hacer posible su reanimación.

La Cuarta Gran Guerra Ninja fue iniciada por Obito Uchiha y Kabuto Yakushi y gran parte de ella se remonta al Segundo Hokage de Konohagakure. Si Tobirama no hubiera tratado a los Uchiha de la forma en que lo hizo, Madara y Obito nunca habrían hecho planes para utilizar el Tsukuyomi Infinito.

Además, si Edo Tensei no hubiera existido, Kabuto no habría tenido fuerzas para la guerra. La mayoría de las acciones de Tobirama favorecieron la Cuarta Gran Guerra Ninja.