Naruto: 10 maneras en que ser ninja arruinó la vida de Kakashi

Kakashi Hatake es uno de los personajes principales de la serie Naruto de Masashi Kishimoto. Es el líder del Equipo 7, formado por Naruto Uzumaki, Sasuke Uchiha y Sakura Haruno, posiblemente los tres personajes más importantes de toda la serie. Kakashi enseña a los tres lo que significa ser un ninja y, por lo tanto, desempeña un papel muy importante para que sean tan grandes como lo son hoy.

Siendo crucial en la trama de la historia, no es de extrañar que Kakashi tenga una profunda historia ligada a él y al igual que muchos otros personajes, ha sufrido bastante en el pasado sólo por ser un shinobi.

Kakashi Hatake era un genio nato y temido en todo el mundo shinobi incluso cuando era un niño. Se convirtió en un Jonin a la temprana edad de 13 años y, como todos los demás niños, fue lanzado a la Tercera Gran Guerra Ninja porque la aldea carecía de mano de obra.

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Aunque le fue bien en el campo de batalla, estuvo lleno de tragedias para él, y las pérdidas que sufrió allí fueron inconmensurables para él.

Una de las primeras cosas que Kakashi Hatake perdió durante la Tercera Gran Guerra Ninja fue su ojo izquierdo. Durante una misión, Kakashi y su equipo se encontraron con ninjas de Kumogakure que lograron secuestrar a Rin.

Mientras luchaba contra ellos, unió fuerzas con Obito Uchiha y, aunque lo consiguió, acabó perdiendo un ojo en el proceso. Más tarde, recibió un trasplante de ojo de Obito, pero a un gran coste.

En la misma misión, Kakashi Hatake acabó perdiendo también a su mejor amigo, Obito Uchiha. Debido a la tremenda habilidad del ninja de Kumogakure con la Liberación de la Tierra, la huida fue extremadamente difícil y habría sido imposible para todos si Obito no hubiera salvado a Kakashi de la caída de una roca.

Con la mitad de su cuerpo aplastado, Obito aceptó el hecho de que iba a morir y regaló su otro Sharingan a Kakashi. Sorprendentemente, Obito vivió, pero Kakashi no lo supo hasta más adelante en la historia.

Por si la pérdida de Obito no fuera suficiente, Kakashi también acabó perdiendo a su única otra compañera de equipo, Rin Nohara, que era el objetivo de Madara Uchiha. La leyenda Uchiha planeaba convertirla en la Jinchuriki de las Tres Colas y hacer que Kakashi la matara para que Obito se uniera a su bando.

Madara tuvo éxito en su plan y aunque Kakashi no quería matarla, ella se puso voluntariamente delante de su ataque y tuvo una muerte dolorosa.

Aunque Rin decidió saltar frente al Raikiri de Kakashi, para él, se sintió como si la hubiera asesinado. Esto le dolió especialmente ya que había prometido protegerla a toda costa a Obito antes de "morir".

Como era de esperar, esta imagen atormentaba a Kakashi y sufría un trastorno de estrés postraumático y se despertaba casi todas las noches con un sudor frío, soñando con matar a Rin una y otra vez.

Kakashi fue un ninja hábil desde muy joven y, como tenía ciertas cualidades que encajaban con un ninja del ANBU, se le pidió que se uniera al equipo. En poco tiempo, Kakashi ascendió a lo más alto y se convirtió en capitán del ANBU.

Sin embargo, su paso por el ANBU fue mucho más perjudicial para él, ya que tenía que matar a otros a diario. Cada vez que atravesaba a alguien con su Raikiri, le recordaba a Rin y empeoraba aún más su trauma.

En el fondo, Kakashi Hatake siempre ha sido una persona amable, pero su paso por el ANBU lo convirtió en un asesino despiadado. A lo largo de los años, Kakashi ha matado a mucha gente, incluyendo a algunos que uno esperaría que perdonara.

Su vida había perdido todo el color en el momento en que dejó el ANBU y sólo después de conseguir su propio equipo shinobi consiguió escuchar a su corazón una vez más.

Entre las pocas personas en las que Kakashi Hatake podía confiar estaba Minato Namikaze, su sensei. Kakashi lo admiraba y no tenía más que respeto por él. Minato era también la última persona conocida que estaba viva de su equipo, aparte del propio Kakashi.

Por desgracia, cuando los Nueve Colas atacaron con Obito, Kakashi perdió también a Minato, y todo su equipo estaba ahora muerto para él. Una vez más, ser un ninja arruinó su vida.

Kakashi se había enfrentado a bastantes dificultades en su vida desde el principio y, aunque no hay una solución para superarlo sin más, mostrar las emociones y dejarlas salir siempre disminuye la carga.

Desgraciadamente, Kakashi ni siquiera pudo hacerlo porque se espera que los shinobi repriman sus emociones. Durante mucho tiempo se ha creído que las emociones son una debilidad para los ninjas, y por ello, Kakashi nunca pudo llorar adecuadamente la pérdida de sus seres queridos.

Kakashi fue el líder del Equipo Siete hasta el final de la serie de Naruto y una de las partes más problemáticas del equipo era Sasuke Uchiha, que había vivido circunstancias similares a las de Kakashi Hatake.

Por ello, Kakashi lo comprendía bastante bien y quiso ayudarlo superando la necesidad de venganza y asegurándose de que se convirtiera en un excelente shinobi. Sin embargo, no pudo evitar que se dejara influenciar por Orochimaru y abandonara la aldea. Como era de esperar, Kakashi también se culpó de ello.